El Gobierno aprueba una renovación parcial del consejo de la CNMC

Empieza la renovación. El Consejo de Ministros ha aprobado dos nombramientos para consejeros de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que luego deberán se examinados por el Congreso de los Diputados para su idoneidad.

Después de este procedimiento, las designaciones volverán al Consejo de Ministros, en unas dos o tres semanas, para que confirme su nombramiento a través de un real decreto, según fuentes conocedoras de esta renovación.

Se trata de Mariano Bacigalupo, que fue secretario del la antigua Comisión Nacional de Energía (CNE); y Pilar Canedo, presidenta de la Autoridad Vasca de la Competencia, propuestos por el Ministerio de Economía que dirige Luis de Guindos.

Salen del consejo Diego Rodríguez y Eduardo García Matilla, mientras que María Ortiz sigue como consejera otros cuatro años. Los nombramientos forman parte del consenso entre el PP y Ciudadanos y cuentan con un perfil más profesional y con experiencia.

Está previsto que en septiembre se produzcan otras renovaciones que, en este caso, tienen que ver con la sentencia del Tribunal Supremo que admitió la demanda presentada por el expresidente de la antigua Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), Bernardo Lorenzo; y el consejero Xavier Omaetxea, que se reincorporarán como vocales de la CNMC. El alto tribunal consideró sus ceses "contrarios a derecho". 

PP-CIUDADANOS

Estos cambos pueden demorar la extinción de la CNMC, que forma parte del pacto PP-Ciudadanos, y que se incluyó en el programa nacional de reformas remitido a Bruselas a principios de mayo. Esta reforma se basa en deshacer el gran organismo actual y crear dos autoridades independientes, una para Competencia y otgra para Regulación.

Se da la circunstancia de que para dividir la CNMC se emplean los mismos argumentos que se usaron en 2013 para su creación e integración de los distintos entes que existían hasta entonces, sin que se cuestione, en cambio, el funcionamiento de organismos bajo cuya supervisión se han producido grandes escándalos y debacles bancarias, como es el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Los expertos temen que entre la creación de agencias que velen por el buen funcionamiento del mercado y aquellas que hacen de "brazo alargado de la intervención del Gobierno", se haya optado por esta segunda fórmula.