El subgobernador pide al sector que cobre por las nuevas tecnologías

El subgobernador del Banco de España, Javier Alonso, ha reclamado este miércoles a los bancos que repercutan a los clientes el coste que les supone prestarles servicios a través de las nuevas tecnologías. El número dos del supervisor ha lamentado que gran parte de las mejoras tecnológicas que ofrece la banca "no parecen tener un coste adicional para el usuario", cuando la realidad es que sí tienen costes y "estos deben repercutirse de forma clara y transparente a los clientes".

En unas jornadas de Deloitte y 'ABC', Alonso se ha referido a servicios como la "inmediatez en el acceso a los datos a través de dispositivos móviles, la reiteración automática de consultas cada pocos segundos, o los envíos masivos de instrucciones o de peticiones de datos". También ha destacado que la inversión en nuevas tecnologías en ocasiones "no llegan a fructificar" o suponen "ciclos de amortización podrían acabar siendo mucho más largos de lo previsto".

Las nuevas tecnologías, ha añadido, tienen además "riesgos" relacionados con la privacidad de la información personal, con el fraude o con los ciberataques, entre otros. Además, su proliferación, ha argumentado, también puede llevar a la eventual "exclusión financiera de aquellos usuarios alejados de ellas, que podrían resultar perjudicados si no se garantiza la continuidad en la prestación de servicios a través de los sistemas tradicionales".

MÁS AJUSTES

En su primera intervención pública, Alonso ha recordado que la baja rentabilidad es uno de los principales desafíos de los bancos, sobre todo en un contexto en que el coste que les supone captar capital es mayor que esa rentabilidad. Además, ha advertido, cumplir los nuevos requisitos de pasivos que puedan absorber pérdidas "no será barato y "puede resultar particularmente difícil para aquellas entidades que, como consecuencia de su modelo de negocio, no tengan la experiencia necesaria para la emisión en el mercado de este tipo de instrumentos".

El subgobernador ha alabado el "notable esfuerzo" de reducción de los costes de las entidades. El número de grupos bancarios, ha recordado, se ha reducido en un 44% desde el 2007; y el número de oficinas y de empleados, en un 37% y 31% desde los máximos de 2008. "Pero aún existe margen de mejora adicional", les ha instado.