INFRAESTRUCTURAS

El Port de Barcelona reclama el corredor mediterráneo y más poder para fijar precios

El presidente, Sixte Cambra, advierte de problemas de competitividad si no mejoran las comunicaciones ferroviarias

Un barco cargando contenedores en el puerto de Barcelona.

Un barco cargando contenedores en el puerto de Barcelona. / periodico

ANTONI FUENTES / BARCELONA

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El puerto de Barcelona vive un momento dulce con unos niveles récord de actividad y de comercio exterior. Sin embargo, el presidente del Port de BarcelonaSixte Cambra, ha advertido de que las instalaciones tienen que superar dos asignaturas pendientes para seguir creciendo y evitar problemas de competitividad. Cambra ha reclamado un cambio en la regulación del sistema de Puertos del Estado para que los grandes 'hubs' como Barcelona dispongan de autonomía para fijar precios y la puesta en marcha del corredor ferroviario mediterráneo.

Para Sixte Cambra, "el modelo actual de puertos no encaja con la realidad porque tiene rigideces muy grandes". La solución pasa porque los grandes puertos como el de Barcelona, que suma el 15% de la facturación de todos los muelles de España, tengan "más autonomía de gestión y capacidad para fijar los precios", que actualmente se determinan a través del BOE. Cambra ha asegurado, en un coloquio organizado por el Círculo Ecuestre de Barcelona, que el nuevo reglamento portuario que se está debatiendo en la Unión Europea va en esa dirección de abrir más la competencia entre ciudades.

ACCESOS FERROVIARIOS

En el caso de las infraestructuras ferroviarias, Cambra ha alertado de que el retraso en el proyecto de nuevos accesos en tren está generando ya algunos problemas a corto plazo y puede afectar la competitividad a medio plazo por la dificultad para transportar mercancías a través de las vías férreas y por la ausencia de ancho europeo. "La salida del puerto en tren que existe ahora a través de la Zona Franca tiene que atravesar nueve pasos a nivel", ha lamentado el presidente del Port de Barcelona.

Por ello, Cambra considera que el impulso del corredor mediterráneo es "un elemento clave" para el proyecto de convertir el puerto barcelonés y su entorno en un 'hub' que lidere la logística en el sur de Europa. La existencia de esa infraestructura, junto con las recientes inversiones de la empresa china Hutchison en las terminales de contenedores, permitirían a Barcelona competir con los grandes puertos del norte de Europa como puerta de entrada al continente de las mercancías de China. "Si tenemos una buena conexión terrestre con Europa, podemos aprovechar la ventaja de que los barcos ganan tres días de navegación en Barcelona", ha explicado el directivo.

El puerto de Barcelona se ha convertido en un indicador de la creciente internacionalización de las empresas catalanas al haber crecido las exportaciones desde el 40% de las mercancías gestionadas antes de la crisis al 60% desde hace dos años. Además, China se ha convertido en el principal destino de los productos que salen de los muelles de Barcelona.                    

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