Rusia envia señales de que está dispuesta a coordinarse con los países de la OPEP

Hasta la fecha era un tema cerrado. Sin embargo, la necesidad podría obligar a Rusia y al cártel de la OPEP a replantearse estrategias y a coordinarse por vez primera para recortar conjuntamente la producción y apoyar la recuperación del precio del barril de crudo, que en las semanas previas ha caido a cotas no vistas en los últimos 12 años. En declaraciones recogidas por Interfax, el ministro de Energía, Aleksándr Novak calificó esta semana de "posible" el recorte de la producción rusa y la participación de delegados de su país en una eventual cumbre de países miembros de la OPEP y estados productores ajenos al cártel.

Rusia es el segundo país exportador de petróleo del mundosegundo país exportador de petróleo del mundo, detrás de Arabia Saudí, con 4,7 millones de barriles al día en el 2014, y el tercero en producción, con 10,8 millones de barriles al día extraídos. Aunque no está integrada en el cártel del crudo con sede en Viena, su economía depende en gran medida del sector, ya que los impuestos a compañías de petróleo y gas constituyen la mitad de los ingresos del presupuesto federal ruso. Las bruscas oscilaciones que experimenta el rublo, la divisa local, son la prueba fehaciente del elevado grado de dependencia de Rusia de sus rentas petroleras. Cuando el precio del barril sube, la cotización de la moneda rusa gana posiciones respecto a las demás, y viceversa.

ENCUENTRO EN RUSIA

Según informa el rotativo económico Védomosti, Nóvak debatió con directivos del sector la posibilidad de una reducción de la producción de entre el 3% y el 5% aunque en el encuentro no participaron ni Igor Sechin, presidente de la petrolera estatal Rosneft, que extrae el 40% del crudo ruso, ni tampoco Vagit Alekpérov, su homólogo de Lukoil. Contradiciendo los insistentes rumores de recortes en la producción, el viceprimer ministro Arkady Dvorkovich descartó tajantemente el viernes semejante posibilidad. "Nuestra posición es que el sector del petróleo es en gran medida, privado; no está bajo control del estado y sus decisiones se toman de acuerdo a criterios comerciales", dijo.

Los primeros rumores de una coordinación con la OPEP aparecieron en otoño, aunque los expertos se encargaron inmediatamente de desmentir tal extremo. Las petroleras rusas prefieren mantener los niveles de producción con el objetivo de mantener la importante cuota de mercado adquirida en los últimos años, para así multiplicar los beneficios cuando el precio del barril se recupere.

Otra de las batallas que dirimirá el sector ruso de los hidrocarburos y que enfrentará en los próximos meses a los productores por un lado, y por otro, al Ministerio de Finanzas, es la posibilidad de que sean canceladas las rebajas de impuestos decretadas en 198 campos petrolíferos, pertenecientes en muchos casos a Surguneftegaz y Gazpromneft, y algunos de los cuales llevan largo tiempo bombeando, junto con otras reformas fiscales que implicarían un incremento de la carga impositiva sobre las petroleras, con el objetivo de incrementar los ingresos del Estado. Los presupuestos federales para el presente ejercicio se elaboraron a partir de un precio del barril de petróleo en torno a los 50 dólares, mientras que en la actualidad oscila entre los 30 y los 35 dólares.

En el caso de materializarse la medida, contradeciría las promesas del presidente Vladimir Putin -cuyos allegados copan los puestos de responsabilidad en el sector- quien declaró que no habría nuevos incrementos de impuestos para el sector antes del 2018. Las petroleras sostienen que, en lugar de incrementar la fiscalidad, lo que necesitan apoyo del Estado para mantener los niveles de inversión y que producción no acabe viéndose afectada.