COMISIÓN DE INVESTIGACIÓN EN EL PARLAMENT

El Govern de CiU y el tripartito defienden la compra de Spanair

JOSEP M. BERENGUERAS / BARCELONA

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Último e intenso día de comparecencias en la comisión de investigación de Spanair. Diversos consellers y exconsellers de la Generalitat, tanto de CiU como del tripartito, todos en el cargo durante los años de inversión de la Generalitat en Spanair, negaron ayer que fuese un error político la compra de la compañía y defendieron, todos, el papel activo e inversor que jugó la Administración catalana en la aerolínea. Porque, según la mayoría, no solo era un "proyecto de país", sino que además era "económicamente viable" si entraba un socio industrial.

Casi una veintena de comparecientes acudieron ayer al Parlament para tratar de esclarecer la quiebra de Spanair, entre ellos Joaquim Nadal (exconseller de Política Territorial i Obres Públiques), Josep Huguet (exconseller d'Innovació, Universitats i Empresa), Antoni Castells (exconseller d'Economia i Finances), Lluís Recoder (exconseller de Territori i Sostenibilitat), Felip Puig (conseller d'Empresa i Ocupació) y Andreu Mas-Colell (conseller d'Economia i Coneixement).

"AENA bloqueaba algunas oportunidades de vuelos internacionales desde Barcelona. Queríamos abrir un mercado protegido por la política de AENA", sostuvo por ejemplo Nadal, quien defendió que Spanair "en su origen, desarrollo y desenlace, fue una operación compartida, querida, aceptada y consensuada por todos los gobiernos que intervinieron", es decir, el tripartito y también el  Govern posterior de CiU.

Huguet fue más de defender que no hubo "ningún error político" en la apuesta y criticó que AENA quiso "matar El Prat" diseñando un modelo centralizado, reprochó a la clase dirigente catalana que "flojeara" al no invertir lo suficiente en Spanair. "Muchos empresarios se apuntaron a la fiesta de IESE, pero luego desaparecieron", completó Antoni Soy (exsecretario general de Indústria). Huguet también criticó que los promotores privados se durmieron al buscar capital extranjero para salvar Spanair: "La gestión del grupo dirigente privado podría haber sido francamente mejorable".

"No se lanzó el dinero en un pozo sin fondo", afirmó por su parte Castells, quien defendió la inversión en la aerolínea pues tenían la "certeza" de que era un "proyecto empresarial de interés estratégico de país" y que era una "iniciativa que venía del sector empresarial". Recoder, mientras, también insistió en la idea de que su Govern "no se lanzó a una piscina sin agua" cuando decidió continuar invirtiendo, y subrayó que el proyecto fue factible hasta el último momento porque había un acuerdo con un socio industrial, Qatar Airways, prácticamente cerrado.

DENUNCIA

"Responsabilidad política en la decisión de seguir con el proyecto por parte de ambos gobiernos, toda; responsabilidad política en el fracaso de la operación, ninguna", sentenció mientras Puig, quien apoyó a capa y espada la actuación del Govern durante la inversión en la aerolínea y también en el momento de parar el crédito y cerrarla. El conseller relató la búsqueda de un socio industrial, y citó tanto a la china HNA como a Qatar Airways. Esta última fue la que mostró más interés, y con la que trabajaron hasta el último día: Qatar Airways mantuvo su propósito hasta que, en enero del 2012, comunicó que renunciaba al proyecto por una denuncia ante la Comisión Europea de ayudas gubernamentales. Según Puig, el Govern tomó la decisión "al día siguiente de frenar la operación".

Mas-Colell también apoyó la compra, reveló que viajó a Doha para negociar la venta de la firma y que técnicos del Govern se reunieron en "más de cinco ocasiones" en Londres y Barcelona con personal de la aerolínea catarí para redactar los detalles de la operación y el plan de futuro de la firma. Damià Calvet (exsecretario de Territori) agregó que  incluso se definió el futuro de Spanair, nuevas rutas intercontinentales a abrir, inversiones... Mas-Colell también negó que el Govern ofreciese inyectar más dinero en la aerolínea días antes de la quiebra.