Intangibles
Cuestión de concepto
Esther Sánchez
Manager de Recursos Humanos y Profesora de Derecho del Trabajo. Analista de Agenda Pública.
ESTHER SÁNCHEZ
El reciente Informe de Competitividad del Foro Económico Mundial no muestra, otra vez, la fotogenia de España, y menos si se acerca el zoom. Si a nivel general ocupa el puesto 35, cuando mide la eficiencia del mercado laboral, se va al puesto 100, por debajo, en Europa, de Eslovenia, Eslovaquia, Lituania, Montenegro, Polonia o Portugal. Respecto a los países europeos que catalogamos como prósperos el diferencial es devastador. Gran Bretaña está en el puesto 5; Dinamarca, el 12; Noruega, el 13; Suecia, el 20; y Alemania, el 35.
La pregunta que salta automáticamente es: ¿Cómo se da este resultado tras unas reformas laborales que, se dijo, nos equiparaban con el «modelo europeo»?
A falta de indicadores científicamente válidos para medir la efectividad de dichas reformas, y para evitar la respuesta de que todavía no hemos tenido suficiente tiempo para calibrar sus efectos, propongo cambiar el foco de reflexión.
El informe define los pilares sobre los que se sustenta la competitividad. Aquí ya aparece la sorpresa. Afirma que la flexibilidad y la eficiencia del mercado de trabajo son críticos para asegurar que los trabajadores estén, en todo momento, ubicados en el puesto más adecuado y provistos de todos los incentivos que les permitan dar lo mejor de sí.
Es decir: la flexibilidad no es un instrumento para abaratar costes laborales o para cuadrar los resultados contables de la empresa. Es un instrumento inteligente al servicio del desarrollo profesional y, por tanto, del desarrollo de la actividad productiva. Pone el acento en la persona y no en la mecánica financiera. Y en definitiva, es un instrumento que establece, como condición previa necesaria, disponer de una buena cultura en gestión de personas.
Si avanzamos en la lectura, el informe insiste, una vez más, en la importancia de favorecer los tránsitos entre desempleo y empleo. Esta no es una cuestión que atañe solo a los servicios públicos de empleo o a las agencias de colocación. La nueva economía debería promover que, durante el contrato de trabajo, las personas desarrollen sus talentos y crezcan en polivalencia.
¿Y por qué no plantearnos que, en caso de despido, se incorporen obligaciones reales y efectivas de recolocación, más allá de la indemnización que hoy ya está desprovista de su naturaleza compensatoria?
El informe de Foro Económico también habla de salarios. Advierte que la eficiencia no da carta blanca a su reducción, sino que ha de garantizar que las fluctuaciones salariales no provoquen alteraciones sociales; y que los sistemas eficientes son los que garantizan la meritocracia.
Ante estas explicaciones, preguntémonos si el Foro trabaja con conceptos armonizados.
- Muere Itxaso Mardones, reportera de Gloria Serra en 'Equipo de investigación', a los 45 años
- Hacienda te devuelve 300 euros si tienes un hijo menor de 25 años y 900 si tienes dos: así tienes que ponerlo en la declaración de la renta
- ¿Llamadas que cuelgan? Así son las robollamadas, la nueva táctica de spam telefónico
- Adiós a los cajones de la cocina: la solución con perchas que puedes colocar en cualquier parte
- Sánchez se plantea renunciar y convocar elecciones tras la investigación a su esposa
- La querella del novio de Ayuso se admitirá a trámite pese a la campaña del fiscal para que sea rechazada
- El CIS publica una encuesta sobre las elecciones en Catalunya a pocas horas del comienzo de la campaña
- Pedro Sánchez se plantea renunciar como presidente del Gobierno tras la investigación a su mujer