Conflicto en la concesión de una infraestructura clave

La bolsa castiga a Sacyr por frenar la ampliación del canal de Panamá

Obras de ampliación del canal de Panamá, en octubre del 2012.

Obras de ampliación del canal de Panamá, en octubre del 2012.

EL PERIÓDICO
MADRID

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Alos inversores no les suelen agradar las noticias inesperadas, pero les disgustan todavía más los enfrentamientos entre empresas y gobiernos. La decisión de Sacyr y sus socios de paralizar la obra de ampliación del canal de Panamá el 20 de enero si la sociedad gestora de la infraestructura no se compromete a pagarles cerca de 1.200 millones de euros adicionales a los casi 2.200 millones pactados en el contrato provocó ayer que la constructora cayera en bolsa el 8,95%, en una sesión en la que llegó a perder mucho más, en torno al 18% de su valor.

La decisión del consorcio encabezado por la constructora española (posee el 48% del mismo) y en el que también participan la italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña Cusa amenaza con abrir un conflicto internacional. El presidente del país centroamericano, Ricardo Martinelli, aseguró ayer que los gobiernos español e italiano tienen una «responsabilidad moral» por la actuación del consorcio: «Tanto el presidente de España como el de Italia en aquellos momentos nos dijeron que esto contaba con la responsabilidad solidaria de ellos».

VIAJE / «Yo voy a ir a España e Italia a exigirle a estos gobiernos, porque no puede ser que una empresa meta una cantidad enorme de sobrecostos en una obra de ampliación, que es una obra de la humanidad, que cuando ellos licitaron pusieron un precio y ahora van a venir con el cuentito de que están subiendo los precios», aseguró el presidente panameño.

Martinelli calificó de «gran irresponsabilidad que unas empresas que por otros motivos, por cuestiones financieras, problemas que tienen en otros lugares, vengan a perjudicar al canal de Panamá». En este sentido, afirmó que va a reclamar que sigan con la obra según las condiciones estipuladas en el contrato suscrito en el 2009.

Según el Gobierno español, los ministerios de Asuntos Exteriores y Fomento están trabajando a través de sus contactos con sus homólogos panameños y con la empresa «para llegar a un acuerdo que ponga fin a este desequilibrio comercial», ya que --añadieron fuentes diplomáticas-- «Panamá es un país amigo y cercano a España con el que compartimos el deseo y el interés de que se encuentre una solución a la mayor brevedad posible». El diputado de IU Gaspar Llamazares acusó a Sacyr de perjudicar la imagen de España «a nivel internacional».

En una nota a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) antes de la apertura de la bolsa, Sacyr insistió en acusar a la gestora del Canal de «incumplimientos graves» y defendió que su decisión de paralizar la obra si la sociedad no los corrige es conforme al contrato. Entre otras cuestiones, la constructora asegura que no recibió toda la información necesaria antes de firmar y acusa a la firma de ponerle trabas en cuestiones como la composición del cemento usado.

INFORMACIÓN DUDOSA / Sacyr se declaró dispuesta a mantener el diálogo para lograr un acuerdo, pero recordó que ha presentado «fundadas reclamaciones» en relación con los sobrecostes del proyecto derivados de circunstancias «sobrevenidas e imprevisibles» ante las diversas autoridades competentes, incluida la Corte Internacional de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional (CCI), sin que la gestora del canal los atendiera.

Pese a ello, la compañía dio a entender hace apenas unos días, el lunes de la semana pasada, que la ampliación del canal iba bien. La CNMV le exigió a finales de noviembre varias aclaraciones sobre sus cuentas del 2012, entre ellas por qué el consorcio se había apuntado como ingresos unos 486 millones de euros que exigía a la gestora de la infraestructura por sobrecostes. «Se estima probable que el cliente aceptará las reclamaciones», defendió Sacyr.

La constructora también aseguró que la construcción de las tercera esclusas del canal «se está ejecutando dentro de los plazos establecidos» (se ha avanzado el 65%). El contrato establecía originalmente que la fecha de entrega era el 2014, para coincidir con el centenario de la creación del canal. Sin embargo, la gestora de la infraestructura ha asegurado que el consorcio le ha comunicado que terminará la obra en junio del 2015, en lugar de en la fecha pactada, octubre del 2014.