Revuelo en palacio

Entró en el Salón de los Tapices junto a Bernardino León, secretario general de la Presidencia, y costó ubicarle y recordar su nombre. «¿Quién es ese hombre tan alto?», se preguntaban los asistentes. Un asesor de política internacional del Gobierno, divertido por presenciar el revuelo causado, terminó rápidamente con las vacilaciones: «Paul Volcker, asesor económico de Barack Obama», susurró.

Volcker, de 83 años y 2,01 metros, fue presidente de la Reserva Federal entre 1979 y 1987, y ha ayudado al presidente de EEUU a diseñar una estricta regulación sobre las actividades de riesgo de los bancos estadounidenses. Ahora, como consecuencia de la renovación que el líder demócrata está haciendo en su Gabinete, Volcker dejará el cargo a principios de febrero.

José Luis Rodríguez Zapatero y él se han reunido ya en varias ocasiones, lo que ha ayudado a crear una relación personal muy fluida y cercana, según fuentes de la Moncloa. En esta ocasión, Volcker, que ha viajado a Londres por trabajo, tenía previsto almorzar ayer con el jefe del Ejecutivo. Cuando supo que por la mañana presentaba el Informe Económico 2010, siempre según fuentes de la Moncloa, le preguntó si podía asistir.

Primera fila de lujo

Y en la primera fila estuvo sentado; eso sí, en una discreta silla en la esquina. Las del centro, frente al atril del presidente, estaban reservadas para el presidente del Santander, Emilio Botín; el de Telefónica, César Alierta, y de la Caixa, Isidro Fainé, entre otros. También tuvo un lugar privilegiado el líder de la CEOE, Juan Rosell, que se estrenaba en un acto en el Palacio de la Moncloa.

Las 35 empresas del Ibex estuvieron ampliamente representadas, así como otras que, debido a su capacidad exportadora o el número de empleados, merecieron ocupar un asiento en la sala (El Corte Inglés, Hispasat y Agbar, entre otras). La Moncloa también invitó a organizaciones sectoriales (como Ceca y Farmaindustria), a miembros del mundo académico y de los institutos de estudios de algunas de las entidades bancarias. La ausencia más llamativa fue la de los sindicatos, que sí que han estado representados, con sus máximos dirigentes o con los números dos, en los tres años anteriores en los que Zapatero ha presentado este Informe Económico.

Visita a París

La voluntad del Gobierno de que el presidente recupere presencia pública tras las consecuencias delefecto Rubalcaba-algo que está haciendo con la concesión de varias entrevistas a medios españoles y seguirá en los próximos días con otras en la prensa extranjera- incluirá un viaje a París, para entrevistarse con Nicolas Sarkozy.

Fuentes diplomáticas explicaron que la visita se producirá a finales de la semana que viene. Ambos dirigentes comentarán las reformas emprendidas por el Gobierno español, la crisis de la zona euro, el contenido del Consejo Europeo extraordinario de principios de febrero sobre Energía y la estrategia que Francia quiere desarrollar este año que preside el G-20.