Eroski y Permira, favoritos en la puja por Caprabo

EFE / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El grupo de distribución Eroski y el fondo de inversión Permira se perfilan como favoritos en la puja por Caprabo, que se encuentra en la fase final de su venta por un precio que se situaría entre 800 y 1.000 millones de euros.

Esta cantidad incluiría la deuda del grupo pero dejaría al margen los inmuebles que, en su mayoría, son propiedad de las familias fundadoras y permanecerían bajo el control de las mismas, lo que también obliga a una negociación sobre los precios de alquiler que será determinante en la cuantía final.

En el último tramo de la puja por la compra de Caprabo, además de Eroski y Permira, también se encuentran los grupos Carrefour, Alcampo y El Árbol, que a finales de mayo han de presentar ya una oferta vinculante para intentar hacerse con la compañía. Fuentes de Caprabo han explicado que el precio será determinante en la toma de decisión, pero que el mantenimiento de la marca propia primará mucho en la elección, que se tomará en junio.

La familias fundadoras de Capabro (Carbó, Botet y Elías), accionistas junto a La Caixa, que tiene un 20%, han encargado la operación al banco de inversión Morgan Stanley. Inicialmente, entre 10 y 15 grupos presentaron sus propuestas genéricas y, tras la primera criba, ahora quedan cinco finalistas.

20% EN CATALUNYA

El grupo vasco Eroski quiere crecer en España y la compra compensaría su escasa implantación en Catalunya, donde solo tiene cinco hipermercados, por lo que Caprabo, que tiene más de un 20% de cuota del mercado catalán, es una pieza apetecible. Eroski ya adquirió este año seis hipermercados y un supermercado a Caprabo situados en la zona de Levante, que la compañía ha reconvertido en supermercados Eroski, ya que toda su red trabaja con esta insignia.

De la misma manera, Caprabo también vendió este año otros 63 supermercados a la cadena Consum situados en la Comunidad Valenciana, Murcia, Castilla-La Mancha y Andalucía, que junto con la anterior operación ha supuesto unos ingresos de unos 165 millones que hacen prever que volverá a tener beneficios este año, según analistas del sector.