FÚTBOL Y UNIVERSIDAD

Pep Guardiola, al ser investido doctor honoris causa por la Universidad de Manchester: "Me duele todo el cuerpo con lo que vemos en Gaza"

Pep Guardiola.

Pep Guardiola. / PepTeam

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Pep Guardiola ha sido investido doctor honoris causa por la Universidad de Mánchester (Reino Unido), en reconocimiento a la "extraordinaria contribución" que ha hecho a la ciudad desde su nombramiento como entrenador del Manchester City en 2016.

El técnico de 54 años, que ha llevado al City a ganar seis títulos de la Premier League y la Liga de Campeones en 2023, fue investido doctor honoris causa por el rector de la Universidad, Nazir Afzal, en el Whitworth Hall.

"Manchester significa mucho para mí. He pasado aquí nueve años y se ha convertido en mi hogar. La gente, la cultura, mi increíble club de fútbol, mis colegas... todo es muy especial para mí y para mi familia. Cuando llegué en 2016, no sabía cuánto tiempo pasaría aquí. La forma en que esta ciudad me abrazó hizo que todo fuera fácil. Mi tiempo aquí ha sido precioso", indicó el técnico catalán.

El premio también reconoció la contribución de Guardiola a la ciudad fuera del fútbol, incluso a través de su fundación familiar, la Fundación Guardiola Sala.

El profesor Duncan Ivison, presidente y vicerrector de la universidad, alabó el trabajo del preparador de Santpedor. "Pep es un innovador y un ganador que ha inspirado a millones de personas a través de su éxito como entrenador. Ha desempeñado un papel fundamental en el éxito mundial del Manchester City y nos sentimos honrados de que haya decidido aceptar este título", apuntó.

Guardiola hizo mención al sufrimiento que provocan las guerras, aludiendo a Congo, Sudán, Ucrania y también Gaza.

"Es tan doloroso lo que vemos en Gaza. Me duele todo el cuerpo. Para ser claro: no se trata de ideología, de que yo tenga razón y tú no. Se trata simplemente del amor a la vida, del cuidado del prójimo".

Y añadió: "Quizás veamos a niños y niñas de cuatro años asesinados por una bomba o en un hospital —que ya no es un hospital— y pensemos que no es asunto nuestro. Sí, vale. Podemos pensarlo. Pero tengan cuidado. El próximo será nuestro. Los próximos niños de cuatro o cinco años serán los nuestros. Veo a mis hijos María, Marius y Valentina todas las mañanas desde que comenzó la pesadilla en Gaza. Y tengo mucho miedo. Quizás esta imagen les parezca lejana de donde vivimos, y quizás se pregunten qué podemos hacer".

Y concluyó con una fábula: "Hay una historia: un bosque está en llamas. Todos los animales viven aterrorizados, indefensos. Pero un pequeño pájaro vuela de un lado a otro hacia el mar, llevando gotas de agua en su pequeño pico. Una serpiente ríe y pregunta: "¿Por qué? Nunca apagarás el fuego". El pájaro responde: "Sí, lo sé". "¿Entonces por qué hacerlo una y otra vez?", pregunta la serpiente. "Solo hago mi parte", responde el pájaro. El pájaro sabe que no apagará el fuego, pero se niega a hacer nada. En un mundo que a menudo nos dice que somos demasiado pequeños para marcar la diferencia, esa historia me recuerda que el poder de uno no se trata de escala, se trata de elección, de estar presente, de negarse a callar o a quedarse quieto cuando más importa..."