Windsurf

Blanca Alabau bate su propio récord del mundo de velocidad en wind foil: "Sentí un calor inmenso por dentro. Fue brutal"

Durante el Campeonato del Mundo de Velocidad celebrado en La Palme, Francia, Alabau alcanzó una velocidad promedio de 31,66 nudos (58, 63 km/h) sobre una distancia de 500 metros

Blanca Alabau durante la competición en Francia.

Blanca Alabau durante la competición en Francia. / Blanca Alabau

Begoña González

Begoña González

Barcelona
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La windsurfista española Blanca Alabau ha vuelto a escribir su nombre en la historia del deporte al batir su propio récord mundial de velocidad en la disciplina de 'wind foil'. Durante el Campeonato del Mundo de Velocidad celebrado en La Palme, Francia, Alabau alcanzó una velocidad promedio de 31,66 nudos (58, 63 km/h) sobre una distancia de 500 metros, superando así su anterior marca personal y mundial.

La sevillana llevaba dos años buscando las condiciones perfectas para batir su propia marca. “Hemos estado modificando la tabla y buscando el momento perfecto para conseguirlo. No ha sido fácil pero por fin ha llegado y estoy emocionada”, confiesa a EL PERIÓDICO la hermana menor de la campeona olímpica de windsurf Marina Alabau. En 2022, Blanca consiguió convertirse en la mujer más rápida del mundo sobre la tabla con una velocidad sostenida de 29,8 nudos (55,1 km/h) en la misma localidad francesa en la que esta semana consiguió superarse.

Desde entonces inició una lucha consigo misma para batir su propia marca. “Llevaba dos años que no salía, intentándolo en todos los sitios a los que iba siempre que se daban las condiciones”, asegura la windusrfista. Para batir un récord como este se necesita un viento fuerte, de entre 25 y 32 nudos, porque si es menos no se consigue la potencia para generar velocidad y si hay más se descontrola la tabla y la velocidad se frena. Por otro lado, el agua debe estar plana, sea mar o lago, y que la densidad del agua sea la indicada sin algas, ni peces ni demasiada sal. 

Trabajo de ingeniería

“He cambiado absolutamente todo desde entonces. La vela, la tabla, el foil… Llevo varios años trabajando en el desarrollo con los ingenieros y ha dado sus frutos”, afirma la deportista que asegura que deportivamente se encuentra en su mejor momento. “Físicamente creo que estoy al límite. Tanto en técnica como en preparación y creo que lo único que podría conseguir romper el récord ahora sería un nuevo desarrollo de la tabla, pero por el momento no hay presupuesto para ello”, añade. 

Durante la competición Alabau supo al momento que estaba siendo muy rápida. “Miré el GPS y cuando vi la velocidad sentí un calor inmenso por dentro. Fue brutal. No paraba de mirar a mi alrededor pensando ‘¿habéis visto eso?’”, reconoce con una sonrisa. La deportista pasará unos días en tarifa con su familia para descansar y asumir su logro. "Estoy demasiado feliz", zanja.