VÍDEO | Los graves insultos de Carvajal a De Burgos Bengoetxea desde detrás del banquillo

El Real Madrid llegó a acariciar la Copa del Rey con una remontada en menos de 10 minutos al ocaso del tiempo reglamentario. Pero aparecieron Ferran Torres para llevar el partido a la prórroga y, ya al final del tiempo extra, Jules Koundé, para desatar la locura azulgrana en La Cartuja y vencer. Un final que los futbolistas del Real Madrid vivieron con frustración y la pérdida de papeles de varios futbolistas como Rudiger, que lanzó una botella al colegiado De Burgos Bengoetxea.

El central alemán, Lucas Vázquez y Jude Bellingham recibieron una tarjeta roja al final del encuentro. Lucas Vázquez "por protestar" la decisión "entrando varios metros en el terreno de juego haciendo gestos de disconformidad"; Bellingham, por dirigirse al árbitro "en actitud agresiva, teniendo que ser sujetado por sus compañeros" ya una vez concluido el encuentro.

La sanción más dura se la va a llevar Rudiger, que lanzó un objeto al colegiado y posteriormente, al recibir la roja, tuvo que ser agarrado por sus compañeros al tener "una actitud violenta". De acuerdo con el Código Disciplinario de la RFEF, Rudiger podría recibir una sanción de entre 4 y 12 partidos, castigo que cumpliría en la Liga y que, en tal caso, le dejaría sin jugar el clásico en Montjuïc.

La indignación de Carvajal

Fuera del terreno de juego, detrás del banquillo blanco, Dani Carvajal tampoco pudo contener su rabia al ver como su equipo caía derrotado en la final copera. Ya en la eliminatoria contra el Arsenal, el lesionado lateral madridista bajó al terreno de juego al descanso para encararse con Bukayo Saka, que acababa de fallar un penalti.

Las decisiones de De Burgos Bengoetxea y el resultado final sulfuraron a uno de los capitanes blancos, que insultó gravemente al árbitro tal como captaron las cámaras de Movistar+. “¡Hijo de puta! ¡‘Cagaos’! ¡Caradura! ¿Y esa de Lamine? Para allí“, gritaba Carvajal levantado de su asiento junto al también lesionado Militao, también visiblemente enfadado.