Lewandowski se lesiona: corre peligro su presencia en la final de Copa y ante el Inter

Tuvo que pedir el cambio. Cuando el partido estaba ya igualado (3-3), Robert Lewandowski miró al banquillo y reclamó ser sustituido. Muy a su pesar debía abandonar el césped de Montjuïc porque había sufrido un problema físico. Habló desde la distancia con Hansi Flick, su entrenador, y le dijo que no podía seguir, por lo que ahora corre peligro su presencia en la final de la Copa del Rey del próximo sábado en Sevilla ante el Madrid. 

El club, tras el 4-3, no ha emitido aún ningún comunicado médico oficial sobre el 'nueve', aunque podría estar entre dos y tres semanas de baja. "Debemos esperar hasta mañana. Debemos esperar, esa es mi experiencia. Tenemos que esperar y ya veremos lo que pasa", ha comentado Flick.

Notó unas molestias en la parte posterior de su pierna izquierda, por lo que decidió sentarse sobre la pradera de Montjuïc mientras venían los médicos y fisioterapeutas a chequear su estado físico.

Mal asunto porque la final está demasiado cerca para el delantero polaco, que tuvo poco peso en el volcánico duelo contra el Celta. Y, a la espera de que determinen los médicos, será complicado que pueda estar en el doble duelo contra el Inter.

El Barça sí tiene fútbol para remontar

Apenas dos disparos, ambos en la primera mitad (m. 2 y m. 42), pero sin enfocar bien. Se marcharon fuera. En la segunda parte ni rastro de Lewandowski hasta que notó esa lesión que le hizo marcharse del campo coincidiendo, además, en que el Barça no tenía un delantero centro nato porque Flick había prescindido antes de Ferran Torres.

La opción Dani Olmo de 'nueve'

Le tocó, por lo tanto, ejercer en esa media hora final a Dani Olmo el rol de 'nueve'. Y tuvo enorme impacto en el equipo porque marcó el 2-3 y provocó el penalti del 4-3 anotado por Raphinha.

Quiso ser prudente Flick para no dar demasiadas pistas sobre la lesión muscular que padece Lewandowski. Pero entre Ferran Torres y Dani Olmo tendrá que apañarse para este momento decisivo de la temporada, con una final de Copa a la vuelta de la esquina y la semifinal europea contra el Inter a tan solo 11 días.