Ter Stegen se incorpora al grupo para acabar la temporada con el Barça

Marc André ter Stegen se propuso acabar la temporada jugando en cuanto conoció el alcance de la lesión y se saldrá con la suya. El portero alemán, y capitán del equipo, ya se entrena con el grupo, con el que ha dado el penúltimo paso para la reaparición; el último escalón hacia el terreno de juego lo subirá en cuanto lo decida Hansi Flick.

Seis meses de convalecencia y rehabilitación ha consumido Ter Stegen en Sant Joan Despí desde que el 22 de septiembre fuera retirado en camilla del campo del Villarreal. Tras una mala caída al atrapar un balón más allá del segundo palo, en la que iba a ser la jugada final del primer tiempo, ya no se levantó.

Sin poder tenerse en pie, roto por el dolor físico y psíquico al interpretar la gravedad de la lesión, el meta se marchaba con la rotura completa del tendón rotuliano de la rodilla derecha, y al día siguiente era operado por el doctor Joan Carles Monllau. No hubo pronósticos que precisaran el periodo de recuperación, pero se estimaban largos. Esa rodilla había sido intervenida antes dos veces. Ante los pronunciamientos que anunciaban el final de la temporada, Ter Stegen se rebeló.

A mediados de febrero se puso los guantes y se calzó las botas para volver al campo Tito Vilanova para trabajar en solitario. Con el paso de los días sus compañeros han ido viéndole con mayor frecuencia hasta que se ha convertido en uno más y se reunirá con sus colegas de la portería para completar todas las rutinas que hacen ellos.

Con Iñaki Peña, que le sustituyó bajo los palos, y con Wojciech Szczesny, que cubrió su ausencia en la plantilla en el perfil del portero experimentado que debía ayudar a sostener al equipo los siguientes ocho meses.

Un total de 22 partidos estuvo Peña en el campo, que al final acabó cediendo el puesto, por voluntad de Flick, a Szczesny, que ha jugado 18. La apuesta, dicen los números, se ha demostrado acertada, ante el mito polaco. Con él no se ha perdido ninguno de los 18 encuentros: suma 16 victorias y dos empates (2-2 con el Atalanta y 4-4 con el Atlético).

Quedan días para la apasionante incógnita que deberá aclarar Flick: ¿quién será su número uno?