Boxeo

Cristóbal Lorente, bicampeón de Europa del peso pluma: "Yo no quería ser boxeador, quería jugar al fútbol"

Una victoria en su próxima defensa del título continental podría situar al púgil barcelonés entre los primeros del ránking del peso pluma de World Boxing Council (WBC), del que ahora figura en la novena posición, acercándolo todavía más a dar un paso más en su carrera y pelear por su primer cetro mundial

Cristóbal Lorente durante su última defensa del título europeo.

Cristóbal Lorente durante su última defensa del título europeo. / Ludovico Dujentos

Begoña González

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Barcelona
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Tras lograr el bicampeonato europeo en el peso pluma y mantenerse invicto, Cristóbal Lorente (Barcelona, 1996) se ha posicionado como uno de los boxeadores más relevantes de Europa y acaba de recibir la distinción de Mejor Boxeador del año 2024 para la revista Espabox y Sportium. Lorente, con un récord inmaculado de 20-0-1, 8KO ha brillado con sus victorias en el extranjero, superando a veteranos como Mauro Forte y Francesco Grandelli, y en mayo de 2025 afrontará un reto aún mayor al defender nuevamente el título frente al irlandés Michael Conlan, que fue medalla de bronce en Londres 2012.

Una victoria sobre Conlan podría situar al púgil barcelonés entre los primeros del ránking del peso pluma de World Boxing Council (WBC) - del que ahora figura en la novena posición- acercándolo todavía más a dar un paso más en su carrera y pelear por su primer título mundial. “Quiero ganar para seguir creándome un nombre a nivel mundial. En Europa ya lo he ganado todo y quiero saltar al siguiente escalón. Esta pelea me puede abrir las puertas al mundial”, reconoció el púgil a EL PERIÓDICO. 

Cristóbal lleva tiempo esperando el momento de seguir los pasos de su compañero de gimnasio y prácticamente hermano, Sandor Martín, quien recientemente se enfrentó en Nueva York a Alberto Puello por el título mundial del peso superligero. “Sandor es una persona muy importante para mí. Hemos ido al colegio juntos y hemos entrenado juntos desde los 6 años. Llegar a hacer la mitad de lo que él ha conseguido sería un orgullo para mí”, desvela el boxeador. Ambos se iniciaron en el noble arte en el KO Verdún, el gimnasio del padre de Sandor, y han compartido juntos más de 20 años de boxeo y aprendizaje aunque no siempre a gusto de todos.

Del fútbol al título europeo

“Cuando tenía seis años el boxeo se puso de moda en mi barrio. Mis compañeros de clase iban al gimnasio y mis padres decidieron apuntarme a mí también, aunque a mí no me convencía”, se confiesa el púgil. “Yo lo que quería de verdad era jugar al fútbol. Siempre decía que lo probaría un tiempo y luego lo dejaría pero mi madre me obligó a hacerlo al menos un año entero porque había pagado las mensualidades por adelantado. En esos meses cambiaron mucho las cosas”, rememora entre risas el campeón. 

Cristóbal Lorente durante su última defensa del título europeo.

Cristóbal Lorente durante su última defensa del título europeo. / Ludovico Dujentos

Desde entonces, bajo las indicaciones de su entrenador, Rafa Martín, y junto a su amigo Sandor, el boxeo se convirtió en su vida. “El KO Verdún se convirtió en mi familia. Iba con ellos de colonias, a entrenar, a eventos, veladas… El gimnasio se convirtió en mi vida y encontré mi lugar”, cuenta. A los 13 años hizo su debut en kickboxing, llegando a realizar alrededor de 30 peleas amateurs y unos años más tarde se pasó en exclusiva al noble arte, disciplina en la que realizó 50 combates amateurs antes de dar el salto a profesional en 2016. “Pasé de ser un niño al que sus padres apuntaron al gimnasio para hacer amigos a ser dos veces campeón de Europa”, resume el boxeador. 

Invicto fuera de casa

Desde entonces, su trayectoria ha sido estelar y su récord, impoluto. “Sigo invicto porque es el resumen de más de 10 años de trabajo, pero tuve mala suerte porque el covid irrumpió cuando todavía llevaba una trayectoria corta en profesional y se paralizó un poco mi carrera. Por suerte pude aguantar y ahora he llegado a donde quiero estar”, asegura el barcelonés. En su historial, las victorias que más le han hecho brillar han sido siempre fuera de casa, y no duda en darles el valor que merecen. 

“Ganar fuera de casa vale el doble. Siempre hay que hacer algo más cuando estás en territorio hostil. No me da miedo salir de casa para pelear y lo he demostrado. Por desgracia en España todavía es muy difícil traer combates por títulos europeos”, puntualiza. El título europeo lo consiguió en Albania, lo revalidó en Italia y ahora buscará renovarlo nuevamente en Irlanda.

A pesar de encontrarse en su mejor momento, Cristóbal no es un peleador dado a la provocación. “Nunca he hecho ruido. He sido más de demostrarlo siempre. Pero hubo épocas, al principio, en las que ni yo confiaba en mí”, reconoce el boxeador. La confianza no la ganó solo, su equipo tuvo mucho que ver en eso. “Rafa (Martín) me ha ayudado mucho a ganar esa confianza y seguridad que hoy tengo y que me permite demostrar al mundo que he nacido para esto”, zanja listo para enfrentarse a su próximo reto. 

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