Andà p'allá, bobo

Madrid se quema, se quema Madrid

Andá pallá Bobo by Emilio Pérez de Rozas

Andá pallá Bobo by Emilio Pérez de Rozas / ·

Emilio Pérez de Rozas

Emilio Pérez de Rozas

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¡Uf!, no vean cómo está Madrid. Guau. A ellos, que casi todo les sale redondo en los últimos minutos, que son capaces de pasarse 90 minutos sin pegar golpe y, de pronto, ¡booom!, le dan la vuelta al marcador, acaban de morir con su propia medicina.

Y es que hay que hacer caso a Manolo (don Manuel González, técnico del RCD Espanyol), conductor de autobuses, bueno, antes, que supo aparcar el suyo de forma ordenada, disciplinada, profesional y eficaz ante el portal de un portentoso Joan García ¡menudo héroe el chaval! y, en un abrir y cerrar de ojos, protagonizar un contragolpe de examen final de carrera y sentenciar el partido.

Insisto, cuando uno muere con su propio veneno, puede, incluso, recordar aquellos partidos, cantidad de ellos, sí, mira, uno de ellos de los últimos frente al Manchester City, que debió perder por goleada y lo ganó de pura suerte.

Madrid se queda, se quema Madrid que dice la cantinela y, ciertamente, en estos momentos ya solo quedan las brasas pero, seguro, que esto seguirá ardiendo unos días más porque como proclama ‘As’ “la entrada de Carlos Romero, lateral izquierdo del Espanyol, a Kylian Mbappé es roja, rojísima y más que roja todavía” y remata ‘Marca’: “Es una roja como un castillo y debió intervenir el VAR”.

Pues eso, que Romero se libró (“es muy difícil frenar a Mbappé, me he lanzado, ha sido una entrada un poco fea, pero ya le he pedido perdón”) y, minutos después, metió un golazo impresionante, de volea, a centro medido y preciso de El Hilali. Y ese fue el cañonazo, la chispa, que incendió Madrid. Fue ahí donde Madrid empezó a quemarse.

Pueden reclamar la roja a Romero ¡claro que pueden!, pero antes podrían echarle en cara al equipo, a los campeones, haberse paseado durante una hora pensando que, como siempre, ganarían en el minuto 94, fruto de una genialidad de los suyos.

Poco importaba en ese momento que el Real Madrid llevase una hora pensando que iba a ganar como siempre, a bandazos, en alguna oleada, en cierta genialidad de sus galácticos modernos. Poco importaba que sus ricos jugasen con la sobradez que llevan haciéndolo toda la temporada. Hasta que llega el Espanyol, de los últimos, y les maltrata. Los pericos solo habían sumado 18 puntos ante el Real Madrid en todo el siglo XXI. Telita.

Pueden reclamar la roja a Romero, ¡claro que pueden reclamarla!, pero también pueden echarle en cara a los suyos la ausencia, como viene repitiendo Carlo Ancelotti, de “compromiso colectivo”, para no sufrir ante un rival de inferior categoría. ‘Carleto’ fue derrotado anoche por un conductor de autobuses que lleva tres décadas entrando a equipos menores y que, nada más sentarse en el banquillo blanquiazul, dijo que “hasta ahora, en los sitios donde he estado, casi he tenido que barrer el vestuario”.

Les digo que Madrid está en llamas y deben creerme. Madrid se queda, se quema Madrid. Lean lo que dicen en Real Madrid TV, si es que, ya les digo, el asunto está que arde: “Es una agresión en la que puede reventar al jugador, es lamentable. Esto es lo que tiene que aguantar el Madrid en esta liga mugrienta de Negreira. Rafael Louzán (presidente de la Federación Española) se tiene que marchar ¡ya! Sabe lo que hay y le ha dado poder absoluto a Medina Cantalejo, que es el heredero directo de Negreira”.

Kylian Mbappe es atendido en el césped tras una entrada de Romero.

Kylian Mbappe es atendido en el césped tras una entrada de Romero. / AFP7 vía Europa Press

Que no es broma, que esta gente está muy cabreada y cuando Florentino Pérez se cabrea y amenaza con traer (será contratar ¿no?) a árbitros ingleses o alemanes para dirigir los partidos de Liga (¿solo los del Real Madrid?), lo dice muy en serio, que él construye autopistas y aeropuertos más rápidos que Limak y, por tanto, todo lo que él dice (y piensa) va a misa, aunque tenga a todo el fútbol español en contra.

“Es una agresión en la que puede reventar al jugador, es lamentable. Esto es lo que tiene que aguantar el Madrid en esta liga mugrienta de Negreira. Rafael Louzán se tiene que marchar ¡ya!"

Real Madrid TV

Mientras ardía Madrid, Ancelotti siguió siendo un señor, elogiando la apuesta del Espanyol y, sobre todo, no entendiendo cómo no habían expulsado a Romero, autor del golazo de la victoria. “Es inexplicable que ni el árbitro (Muñiz Ruiz) ni el VAR (Iglesias Villanueva) hayan mostrado tarjeta roja en una jugada con riesgo de lesión muy alto. El VAR está para proteger al jugador. Es inexplicable que no sea roja".

Alguien podría recordar hoy que Iglesias Villanueva, el colegiado que debió avisar a Muñiz Ruiz que la entrada de Romera a Mbappé era una roja clamorosa, es el árbitro más duramente criticado por Real Madrid TV. A veces, estas cosas pasan factura y es posible, sí, que la hoguera que tiene en llamas a Madrid haya sido provocada por las brasas de la televisión del ‘ser superior’. Todo puede ser cuando tú, ‘Flo’, vives enfrentado a la Federación, a LaLiga y al colectivo arbitral. Estas cosas pasan. Hasta que llegue tu Superliga, amigo, también llamada Unify League.