9 PUNTOS DE 27
La inexplicable recesión del Barça en la Liga
El equipo de Flick reaparece el martes en la Champions, donde puede asegurarse un puesto entre los cabezas de serie si vence al Benfica

Uche explica algo a Gavi agarrándole por el cuello en Getafe. / Valentí Enrich


Joan Domènech
Joan DomènechPeriodista
Periodista. Título de Entrenador de fútbol nivel A. Deportista vocacional. Tras retirarme como futbolista, empecé a trabajar en Mundo Deportivo (12 años, 1988-2000). He asistido a cuatro Mundiales y cuatro Eurocopas. Coautor de varios libros. Miembro del colectivo ‘Periodistes Solidaris’ y 'Amics de Johan'.
El 26 de octubre del año pasado el Barça se marchaba levitando del Bernabéu. Después de haber sofocado la galaxia con un aplastante 0-4, los chicos de Hansi Flick tenían 30 puntos de los 33 posibles: un 90%. El clásico fue un punto de inflexión y nunca mejor dicho: en los siguientes nueve partidos, hasta el regreso a Madrid para visitar al Getafe, el equipo azulgrana apenas ha obtenido 9 de los 27 puntos en juego: un 33%.
El bajón de efectividad en la Liga contrasta con la brillantez con que el Barça se desenvuelve en las otras competiciones: ha conquistado la Supercopa desplumando de nuevo al Real Madrid, ha arrasado en las dos eliminatorias de Copa al Barbastro y al Betis, y es segundo en la Champions League.
El martes visita al Benfica, virtualmente ya clasificado para las eliminatorias, pero no debe dormirse para no perder la posición de privilegio que ocupa. El triunfo le asegura terminar entre los ocho primeros y un número de cabeza de serie. Huir de la Liga se antoja un alivio para los culés después de la amarga visita a Getafe.

Flick da instrucciones desde la banda en Getafe. / Valentí Enrich
La solidez del tramo inicial (una sola derrota en Pamplona, por 4-2) en las primeras 11 jornadas contrasta con el indiscutible declive que sucedió después del clásico. El estado de gracia continuó en el derbi con el Espanyol, pero se interrumpió bruscamente. Ha sido la única victoria, junto con la de Mallorca, que tiñen de verde las siguientes 9 jornadas, donde el rojo de las derrotas y el naranja de los empates han emborronado la racha liguera hasta convertirla en una de las peores de la historia reciente.

Lamine Yamal frente a tres contrarios en Getafe. / Valentí Enrich
Ni el mal arranque del Barça de Ronald Koeman en la Liga 2021-22, con cuatro victorias en 10 partidos (15 puntos de 30), por cercana, se le puede comparar. Pero le costó el puesto a la leyenda de Wembley. Koeman no era el entrenador elegido por Joan Laporta; sí lo es Hansi Flick, a quien el presidente quiso contratar en la campaña electoral de 2021.
La visita a Getafe se erigía en una exigente prueba para comprobar si el cambio de año operaba la transformación del errante rumbo liguero. La muchachada de Flick (23,5 años fue la media del once inicial) arrastró los pies por el erial de José Bordalás, sucumbiendo a las trampas que esconde el césped del Coliseum.

Balde da un manotazo a Ismael tras la provocación del defensa del Getafe. / Valentí Enrich
Balde cae en todas
Alejandro Balde cayó en todas: se crispó en todas las obstrucciones que le hizo Carles Aleñà, se enfadó con los gritos racistas que escuchó por su banda en el primer tiempo y estalló con la provocación de Ismael, que se mofó en su cara tras un mal disparo a portería. Se libró, en cambio, de la expulsión por el manotazo que soltó al defensa del Getafe.
Las explicaciones posteriores que salieron del vestuario del Barça calcaron las ofrecidas en anteriores tropiezos: la falta de acierto para aprovechar las ocasiones de gol creadas.

Frenkie de Jong explica a González Fuertes que Koundé ha sido agarrado por Uche en un córner. / Valentí Enrich
La lenta circulación del balón apenas incomodó a la zaga del Getafe, la tercera mejor defensa de la Liga con 17 goles encajados, cuatro menos que el Atlético (primero) y la Real Sociedad (séptimo). Pero el Getafe está a un punto del descenso. Es el peor ataque, junto con el Valladolid (14 goles anotados), y tuvo suficiente con acertar una vez. El Barça también perdió con el Las Palmas y el Leganés, en casa, los equipos que están justo por encima tratando de huir de la quema.

Jules Koundé marca el 0-1 del Getafe-Barça. / THOMAS COEX /AFP
El descubrimiento de Flick
Flick descubrió Getafe y conoció a Bordalás, y tampoco supo hallar el remedio para que el Barça volviera a ganar cinco años después. Jules Koundé, al menos, marcó el primer gol azulgrana desde 2019.
“Nunca había vivido algo así” reconoció el técnico después de la experiencia de visitar la casa azul, electrificada por la tensión. Como si se hubiera paralizado por las interrupciones que empezaron a salpicar el final del partido, Flick no agotó los cambios (solo hizo tres, pieza por pieza) ni supo hallar una respuesta útil. Se marchó cabizbajo como sus antecesores.
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