Dos penaltis salvan los errores del Girona ante el Rayo

El regreso de la Liga a Montilivi se saldó con un empate para un Girona que volvió a generar sentimientos contradictorios. Una vez más los errores individuales en defensa han penalizado a los de Míchel, pero dicho esto, el equipo ha sabido reponerse al verse por dos veces por debajo en el marcador y ha acabado salvando un punto gracias a dos penaltis, transformados por Castellanos y Samu Saiz, respectivamente, y muy cerca de la victoria, con un gol anulado a Stuani en la última acción del duelo.

Y eso que el partido se ha puesto de cara para los madrileños ya en el primer minuto, por un despiste garrafal de Miguel. La primera parte se cerró con 1-1 y el Girona al alza y en la segunda, cuando se olía el 2-1 acabó llegando el 1-2 de Isi, corregido poco después gracias a un penalti por manos de Lejeune. Fue un duelo de ida y vuelta, intenso, disputado y distraído, donde los locales firmaron muy buenos minutos y perdonaron mucho, sobre todo al inicio de la segunda parte.

Abonado a los regalos

No hay forma. El Girona sigue abonado a los regalos. Y el primero no se hizo esperar. Apenas se había jugado el primer minuto de partido cuando Miguel Gutiérrez se equivocó peinando atrás un balón aparentemente sin peligro que se convirtió en una asistencia letal para Sergio Camello. Ni David López ni Gazzaniga pudieron hacer nada para evitar el 0-1, y el ambiente festivo de Montilivi se heló de repente. Una jornada más lo de mantener la portería a cero que tanto predica Míchel volvía a pasar de largo, tal y como había ocurrido antes del parón mundialista.

Con la temprana ventaja el Rayo se sintió muy cómodo y, en cambio, al Girona le costaba generar. Poco a poco, sin embargo, los locales se hicieron dueños del balón y, aunque sin ocasiones, empezaron a retrasar a los madrileños, ganando metros, llevando la iniciativa. Era, sin embargo, un dominio estéril. La grisura cambió de golpe a la media hora de juego. Iván Martín, entrando en el área, chocó con Fran García y recibió un pisotón que el árbitro no vio hasta que el VAR le avisó y acabó concediendo la pena máxima, una vez revisada la acción. Castellanos logró el empate en el minuto 33 y con el 1-1 los locales se animaron.

El Rayo ya no se encontraba nada cómodo y era el Girona el que rondaba el segundo. Riquelme, por ejemplo, puso a prueba a Dimitrievski antes del descanso, un parón que los madrileños agradecieron tal y como se había puesto el partido.

Polémica potencial

El guión no cambió en la reanudación. El Girona gustaba y buscaba con convicción el segundo. Castellanos hizo lucir al portero del Rayo con un disparo envenenado, un cabezazo de Arnau salió un poco alto e Iván Martín perdonó en el área tras una gran asistencia de Miguel por la izquierda. En defensa, los locales replegaban bien cuando los visitantes intentaban salir a la contra. El equipo mordía, era intenso, nada que ver con los primeros minutos, o con el desastre de Cáceres en la Copa.

Y cuando mejor pintaban las cosas, cuando el segundo se olía, era el Rayo el que golpeaba. Otro desajuste defensivo del Girona, un balón robado por Unai López, lo aprovechó el Rayo para volver a ponerse por delante en una gran acción de Isi Palazón. Dos errores en la salida de balón, dos remates de los madrileños, dos goles.

El partido volvió a girar como un calcetín y el Rayo recuperó el control cuando peor lo estaba pasando, hasta que otro penalti, éste por manos de Lejeune, permitió a Samu Saiz restablecer la igualada (2-2) a un cuarto de hora del final. Michel explicó tras el partido que el encargado debía ser de nuevo Tati, pero "Samu se lo ha quitado". Potencial problema interno se avecina en Montilivi. Para Andoni Iraola, técnico del Rayo, "no era penalti ninguno de los dos señalados".

En los últimos minutos pudo pasar cualquier cosa porque los dos equipos, lejos de especular, fueron a buscar los tres puntos. La mejor ocasión la tuvo Stuani con un remate de cabeza en el minuto 88 despejado por el portero.

Y en la última jugada del partido, gol anulado al uruguayo por fuera de juego cuando Montilivi había explotado celebrando el triunfo. Al final, Girona y Rayo tuvieron que conformarse con uno que, tal y como se había puesto la cosa, tampoco debe despreciarse.

Ficha técnica

Girona: Gazzaniga, Arnau Martínez, Santi Bueno, David López, Miguel Gutiérrez, Oriol Romeu, Aleix Garcia, Iván Martín (Toni Villa, min. 72), Couto (Valery, min. 72), Riquelme (Samu Saiz, min. 72) i Castellanos (Stuani, min. 78).

Rayo Vallecano: Dimitrievski, Fran García, Santi Comesaña (Falcao, min. 78), Isi, Óscar Trejo (Unai López, min. 62), Abdul Mumin, Álvaro (Chavarría, min. 90), Lejeune, Pathé Ciss, Camello (Diego, min. 90) i Ivan Balliu.

Goles: 0-1, min. 1, Sergio Camello; 1-1, min. 33, Taty Castellanos de penal; 1-2, min. 63, Isi; 2-2, Samu Saiz, min. 76;

Àrbitro: Figueroa Vázquez (Comitè Andalús). Grogues: Arnau, Oriol Romeu, Stuani (Girona) i Isi, Falcao (Rayo); VAR: Iglesias Villanueva;

Estadio: Montilivi. 11.451 espectadors.