LA INDUSTRIA DEL DEPORTE

Una ventana para el otro fútbol

DAZN espera crecer un "triple dígito procentual" con los derechos de LaLiga

DAZN espera crecer un "triple dígito procentual" con los derechos de LaLiga / EFE / Javier López

Marc Menchén

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Este es un año de cambios para el fútbol en televisión. Si en su momento la gran revolución fue poder ver todos los partidos a cambio de pagar, ahora lo es que esa suscripción ya no tiene que ser exclusivamente con un operador de telecomunicaciones. Dazn es la gran novedad esta temporada para los consumidores de LaLiga, si bien la OTT ya lleva tres años buscando construir una oferta deportiva con todos aquellos derechos que Movistar+ no considera estratégicos para retener a los hogares con más recursos y que la televisión en abierto es incapaz de rentabilizar. De ahí que, ahora, todos los ojos estén puestos en esta plataforma de retransmisiones en streaming cuando se trata de hablar de las ventanas para el resto del fútbol que hoy busca su propia ventana.

Muchos pensaron en que a Dazn le podría interesar la Primera RFEF, pero nada más lejos de la realidad. Sumando Segunda División a su oferta, la plataforma se ha asegurado la capilaridad territorial y el contenido extra que puede ser el argumento definitivo para los indecisos. El reto de la Rfef no era menor, especialmente porque cualquier interesado ha visto que era imposible rentabilizar una inversión de 9 millones de euros por temporada en la categoría de bronce y que Luis Rubiales se descolgó pidiendo 15 millones por curso.

Finalmente no se alcanzarán los 4 millones al año, con un modelo híbrido en el que convivirá la OTT de Stats -veremos si con más éxito- y televisiones autonómicas como TV3, que en su día no pagaban más de 40.000 euros por curso a los equipos catalanes de Segunda B. Muchos pueden verlo como un fracaso, aunque lo cierto es que es bajar los pies a tierra sobre la rentabilidad real de la categoría como producto audiovisual y el volumen real de aficionados dispuestos a pagar por una suscripción adicional a la que garantiza ver las grandes competiciones internacionales.

En esas llega el turno del fútbol femenino, que debuta como competición profesional en unos días. Mediapro llegó a poner hasta 3 millones de euros anuales por la entonces Primera Iberdrola para apoyarla en su crecimiento, pero es todo un misterio en qué cifras se moverá la oferta final de los operadores. El Gobierno ha blindado que haya un partido en abierto por jornada, así que muy probablemente Teledeporte o GOL sean su hogar. La duda es si Dazn, que ya ha apostado por la Women’s Champions League, redoblará su apuesta por la modalidad. O si será Movistar+ quien lance la apuesta. No hay muchas más alternativas.

Nerviosismo en la Primera Rfef

Esta temporada todos los clubes deben cumplir una serie de requisitos mínimos que, en el mejor de los casos, exige contar con cerca de 1,5 millones de euros de presupuesto si no se quiere arriesgar con la permanencia. Y a eso se suman toda una serie de inversiones que buscan potenciar el producto a medio y largo plazo. La intención es buena y coherente con lo que se viene haciendo en el fútbol profesional, pero el problema llega cuando el dinero que genera la propia competición no cubre ni un 25% de ese presupuesto.

El debate sobre la sostenibilidad económica hace años que existe y la reforma que dio paso a la desaparición de Segunda B no ha funcionado. El DUX Internacional ha anunciado que no se presentará al primer partido porque no ha encontrado inversores que den sustento económico al proyecto, incapaz de cubrir todos los costes necesarios con televisión, taquilla y patrocinios. El CE Sabadell sí mantiene la operativa, aunque la propiedad también ha hecho un llamamiento para la entrada de nuevos accionistas si se quiere aspirar a algo más que permanecer para siempre en la antesala de LaLiga. Y eso sólo se puede superar con mucho dinero, tanto como el que uno esté dispuesto a perder en el tiempo que compra un club aficionado y lo revaloriza en la élite. Así es como la familia Moreno Pavón ganó más de 70 millones con el CD Leganés.