ATLETISMO

Sydney McLaughlin pulveriza su récord mundial de 400 vallas en el Mundial de atletismo

Sydney MacLaughlin.

Sydney MacLaughlin.

Gerardo Prieto

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Tardaba pero llegó. No hay Mundial que se precie sin algún récord planetario y la estadounidense Sydney McLaughlin lo consiguió en la antepenúltima jornada, mejorando su propia plusmarca universal en 400 vallas (50.68), la primera mujer que baja de los 51 segundos en la carrera de la vuelta a la pista con 10 obstáculos.

Era casi un récord cantado de antemano, pero eso no garantiza nada y menos en la alta competición, en la que se buscan las medallas y las plusmarcas se reservan para los mítines. 

McLaughlin realizó una carrera perfecta -vista desde fuera- y acabó con un tiempo tan extraordinario que le hubiera dado el séptimo puesto en la final de 400 lisos que, minutos antes, había ganado la espectacular bahameña Shaunae Miller, campeona olímpica en esta distancia en Río y Tokio.

Sin rival

La vallista estadounidense de 22 años corrió sin sombras, sin rival que la inquietara. La holandesa Femke Bol, tan joven como la nueva plusmarquista, se llevó la plata (52.27). La campeona en el Mundial de Doha-2019 y plusmarquista de la distancia antes de que McLaughlin le arrebatara el tope mundial, Dalilah Muhammad, acabó en tercera posición (53.13).

Tras la apoteósica final contra el crono, McLaughlin se mantuvo sentada en la pista un buen rato. "Necesitaba procesar el ácido láctico y tener un momento para disfrutar con lo que acababa de pasar".

Como una esfinge, McLaughlin mostró el rostro impenetrable que la caracteriza en todo momento, incluso tras su extraordinaria carrera, cuando afirmó sentirse en un estado de flow constante durante la prueba, la fruición que siente cualquier persona cuando está totalmente centrado en el disfrute de lo que está haciendo. "Solo tuve que dejar a mi cuerpo hacer lo que sabe hacer durante 50 segundos, sacar el talento que Dios nos da a cada uno".

Quien disfrutó de verdad fue el público en el Hayward Filed, viendo como los Estados Unidos sigue arrasando en este Mundial, sobre todo en las carreras cortas. Las estadounidenses del relevo 4x100 se clasificaron fácilmente para la final, seguidas del explosivo cuarteto español (Sonia Molina-Prados, Jaël Bestué, Paula Sevilla y María Isabel Pérez), con 42.61, nuevo récord nacional. La exhibición de McLaughlin había estado precedida minutos antes por el triunfo de su compatriora Michael Norman en 400 lisos (44.29), superando al favorito, el granadino Kirani James, por 19 centésimas.

El muro de los 50 segundos

La inevitable pregunta ahora es si la atleta entrenada por Bob Kersee bajará de los 50 segundos o, mejor dicho, cuando lo hará. 

Kersee es un entrenador de mujeres, casi todas ellas excepcionales, como en su día lo fue su pareja Jacky Joyner-Kersee, o la vigente plusmarquista mundial de 100 y 200, Florence Griffith, o la mujer con más podios que ningún otro atleta, Allyson Felix, por citar algunas entre las más relevantes."No ha sido una carrera del todo limpia, se puede mejorar, sobre todo el margen en el paso de la valla o en la amplitud de zancada", se sinceraba la atleta que piensa en doblar vallas, el 400 y el 110, en los Juegos de París 2024, "pero todo dependerá de lo que opine mi entrenador".