Fútbol femenino

Las claves del Barça-Wolfsburgo de ida de semifinales de Champions femenina

Las azulgranas vuelven al Camp Nou en busca del billete a Turín ante uno de los grandes de Europa

Celebración azulgrana

Celebración azulgrana / FCB

Xavi de la Ossa

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Quedan dos paradas para Turín. La primera se divisa en el horizonte, un Camp Nou que abre de nuevo sus puertas a las campeonas de Europa. La segunda todavía está algo lejos en el mapa, en concreto en Alemania, pero ya habrá tiempo de analizar la vuelta. El Wolfsburgo llega a Barcelona convertido en el rival a batir por un Barça que solo piensa en otra final europea y -por qué no decirlo- repetir éxito de la temporada anterior. Analizamos las tres claves de la ida de las semifinales de la Champions que se disputarán esta tarde a partir de las 18.45 horas.

La velocidad, el punto fuerte del Wolfsburgo

Las alemanas son uno de los equipos más potentes del continente en las transiciones. Presión alta e intensa en salida de balón rival, rápidas al contraataque y capaces de ganar muy bien la espalda de las laterales para llegar con centros al corazón del área. Tienen talento y futbolistas jóvenes para aplicar su idea y a su vez cuentan con la veteranía de Popp o Pajor.

Teniendo en cuenta que la zona central de la defensa del Barça es muy potente con la dupla Irene Paredes-María León y la tendencia de las laterales es a proyectarse en ataque, los espacios entre línea defensiva y portería pueden convertirse en un quebradero de cabeza para las de Giráldez. Si encima las centrales tienen que saltar a la ayuda, el Barcelona deberá construir un entramado defensivo muy solidario para armonizar movimientos y no conceder demasiados espacios.

La presión y las variantes, la baza del Barça

El equipo que mejor juega de toda Europa. La facilidad de movilidad añadido a la calidad individual de sus piezas y la posibilidad de tomar decisiones rápidas convierten al Barça en un equipo muy diferencial. Igual que el Wolfsburgo, salen a presionar la salida rival y, por ende, están acostumbradas a partir con el bloque alto, aunque no suelen encontrarse equipos tan rápidos a la contra.

La clave será incidir por los costados, presumiblemente con Hansen y Rolfö o Pina en los extremos. Con bandas incisivas el Wolfsburgo también deberá tener un ojo puesto en la retaguardia. Jonatan Giráldez también tiene la opción de Oshoala si las alemanas adelantan mucho el bloque para aprovechar la velocidad de la nigeriana a la espalda.

El factor ambiental

El Barça cuenta con una desventaja y es que disputa el choque de ida en casa, pero a su misma vez eso lo convierte en una condición a favor si el público responde. Teniendo en cuenta que las entradas están agotadas y que la afición azulgrana tiene ganas de disfrutar de un buen fútbol, todos los condicionantes están puestos para que el Camp Nou sea una olla a presión. El precedente ante el Madrid invita al optimismo y teniendo en cuenta que el Wolfsburgo eliminó al Barça hace dos temporadas entre los culés habrá también ganas de revancha, algo que jugará a favor de las catalanas.

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