Balonmano

España afronta cargada de confianza la fase decisiva del Mundial

La selección femenina de Prades, que pasó ronda con pleno de triunfos, abre la ‘main round’ con Japón

Carmen Martín selección española baloncesto

Carmen Martín selección española baloncesto / RFEBM

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España iniciará este miércoles, frente a Japón (20.30 horas, Teledeporte), su participación en la segunda fase del Mundial femenino de balonmano, en Torrevieja (Alicante) después de superar la fase preliminar con un pleno de victorias (Argentina, China, Austria), que le permite arrastrar cuatro puntos vitales a la ‘main round’ importantísimos en su objetivo de clasificarse para los cuartos de final.

"El equipo ha dejado muy buenas sensaciones en todos los partidos de la primera fase, ha mostrado un buen tono defensivo y eso es algo fundamental porque si la defensa funciona y la portería aporta tenemos garantías para que el equipo pueda seguir creciendo", señala el seleccionador José Ignacio Prades.

En este sentido, el preparador español advirtió de la importancia de "arrancar con buen pie" una segunda fase, en la que las 'Guerreras' además de con Japón se medirán con las selecciones de Croacia y Brasil. "Sabemos que ahora nos vienen tres auténticas finales, pero el equipo está con mucha ilusión y con muchas ganas de seguir creciendo, para lo cual será fundamental arrancar con buen pie este miércoles ante Japón", dijo el seleccionador español.

El combinado asiático será el primer obstáculo a superar en el camino hacia los cuartos de final, que se jugarán en Granollers. En esta fase previa a las eliminatorias, las 'Guerreras' se cruzarán con los rivales provenientes del Grupo G: Japón, Croacia y Brasil, en este orden.

"Japón tiene un estilo de juego extremadamente rápido, no ya en las transiciones como estamos acostumbradas a ver en otras selecciones, sino en los movimientos en el ataque posicional, por lo que tendremos que estar muy, muy atentas en defensa, porque son jugadoras a las que por sus características cuesta mucho defender", advirtió la central española Silvia Arderius.