Un autogol de Cabrera castiga al Espanyol en Vallecas

El Espanyol llegó demasiado tarde a Vallecas. Estuvo 75 minutos sobre el césped a merced de su rival y solo aprovechó el cansancio del Rayo para buscar con tesón un empate que nunca llegó (1-0). Los dos clubs reforzaron sus estadísticas previas al duelo. El admirable cuadro madrileño sigue siendo el mejor local de la Liga y los blanquiazules continúan sin vencer fuera de casa, con 3 puntos de 24 posibles (tres empates), un balance que permite aspirar a poco más que la permanencia. El Levante, en Cornellà, y el Celta, en Vigo, serán las dos últimas pruebas en la Liga de 2021. 

Viendo la respuesta del equipo en el tramo final del encuentro resulta especialmente dolorosa la derrota de este domingo. La imagen del Espanyol fue notable en el desenlace, pero decepcionante en el resto del choque. El Rayo fue más intenso, creyó siempre en sus posibilidades y consiguió una victoria más, la séptima en ocho partidos como local, un registro impresionante para tratarse del club con menos presupuesto de Primera. Su afición puede estar muy orgullosa de la plaza europea que ocupa actualmente su equipo.

Once de gala

Ambos clubs volvían a reencontrarse en circunstancias muy distintas a las del curso pasado, cuando coincidieron en Segunda. El Rayo fue, junto al Girona, el único equipo capaz de doblegar al Espanyol en las dos citas en la categoría de plata (1-0 y 2-3). Eso sí, sufrió más para lograr el ascenso. Mientras los pericos subieron con cierta comodidad y como campeones, los vallecanos tuvieron que esperar hasta la final del 'play-off' ante el Girona.

En Primera viven tiempos de ilusión y caminan por la zona media-alta sin agobios. Apostó el técnico valenciano por su once de gala con solo un superviviente de la alineación de la Copa en Cantabria: el central Sergi Gómez. El Rayo también reservó a sus mejores hombres en Guijuelo, donde logró el pase en los penaltis el jueves.

Susto de Darder

Desde el primer momento se vio más fresco a un Rayo que se crece ante su gente. El primer susto se lo llevó Darder en un choque con Yangel Herrera que estuvo cerca de sacarlo del partido (m. 11). El centrocampista volvió con un aparatoso vendaje tras recibir grapas en la ceja. 

"Estamos fastidiados. Sabíamos que veníamos a un campo difícil, pero tuvimos ocasiones al final. Es una pena"

— Vicente Moreno / Entrenador del Espanyol

Poca historia tuvo la puesta en escena del Espanyol por el estadio de la calle del Payaso Fofó. Un cabezazo de Raúl de Tomás repelido por Dimitrievski (m. 23) fue lo único reseñable del ataque perico antes del arreón final. El Rayo, ambicioso y tenaz, generó peligro una y otra vez por la banda izquierda. Los García, Fran y Álvaro, se dieron un homenaje por ese carril. Aleix Vidal sufrió horrores y tampoco recibió excesivas ayudas en la cobertura. 

Reacción tardía

Llegó milagrosamente imbatido al descanso el Espanyol a pesar de las ocasiones de Trejo, Catena e Isi, pero era cuestión de tiempo. La insistencia local encontró premio en una nueva llegada por la izquierda de Álvaro que acabó con un autogol de Cabrera (m. 54).

Vicente Moreno agitó el árbol en busca de una reacción que solo llegó en el último cuarto de hora. Dos disparos de Puado (m. 75 y 85) y uno de Pedrosa (m. 80) acercaron al Espanyol al empate, pero el Rayo resistió en un cierre con tangana incluida.