Un juez prohíbe a 11 hinchas del Espanyol entrar al campo por una brutal agresión

Un juzgado penal de Barcelona ha condenado a penas de hasta tres meses de cárcel y la prohibición de acercarse al estadio de fútbol del Espanyol a once hinchas ultras miembros de la asociación La Curva que, en mayo de 2016, propinaron una brutal agresión en la Feria de Abril de la capital catalana a un miembro de un colectivo rival, la Peña Juvenil Españolista 1991. La sentencia sostiene que los acusados rechazan al otro grupo de aficionados, al que asocian a "una tendencia ideológica propia de colectivos de extrema izquierda", frente a la que mantienen ellos, antagónica, de extrema derecha. Así se refieren a ellos con la expresión de "rojos de mierda".

El titular del Juzgado Penal número 9 impone a nueve imputados penas de multa -de entre 1.800 y 3.600 euros- y a otros dos a tres meses de cárcel, además de obligarles a indemnizar a la víctima con 22.496 euros y prohibirles acercarse a menos de mil metros del campo del Espanyol de Cornellà, durante períodos que oscilan de cinco a seis años y medio. La condena de cárcel, sin embargo, se ha suspendido durante dos años, con la condición de que no delincan durante el mismo periodo y asistan a un curso de formación. El magistrado les atribuye a todos un delito de lesiones con el agravante de abuso de autoridad y motivo discriminatorio por ideología, aunque rebaja la pena por las dilaciones indebidas ocurridas durante la tramitación de la causa y el pago de la indemnización.

Puñetazos y patadas

Los hechos se remontan al 1 de mayo de 2016, cuando los once ultras se dirigieron al recinto ferial del Fórum con el ánimo de enfrentarse a simpatizantes de la agrupación contraria. Su propósito, según la sentencia, era "menoscabar la integridad física" de los miembros de la Peña Juvenil. "En grupo y con la seguridad que les brindaba su número", los ultras accedieron al interior de una carpa. En la zona de la barra, localizaron a la víctima y, tras exigirle información sobre otro miembros de la peña, le agredieron, propinándole, incluso, un puñetazo en la cabeza. Algunos de los condenados no hicieron nada para evitar "la brutal agresión", reforzando con su presencia la acción de los principales acusados.

El joven herido, incide el juez, "no tuvo posibilidad de defensa o huida dada la superioridad de los agresores y la ubicación a la que le habían llevado: arrinconado de espaldas a la barra". Cuando a causa de los primeros golpes cayó al suelo, los implicados continuaron lanzándole patadas y puntapiés. Gracias a la intervención de una persona ajena a los implicados, que les recriminó su acción, los acusados abandonaron el lugar, dejando "inconsciente y herido a su víctima", recoge el fallo. La resolución recuerda que no es la primera vez que los miembros de La Curva manifiestan su animadversión hacia la Peña Juvenil u otros colectivos que identifican con una idelogía contraria, detallando otros "episodios de hostilidad".

En su sentencia, el juez recuerda que durante el juicio el fiscal modificó sus conclusiones provisionales rebajando su petición inicial de tres años de prisión para cada uno de los once acusados, al aplicar dos atenuantes. El ministerio público argumentó que con carácter previo al inicio de las sesiones, los acusados habían consignado el pago al perjudicado del importe correspondiente a la totalidad de la indemnización. Además, el fiscal aludió a la existencia de dilaciones indebidas durante el proceso judicial.