El Girona respira con un triunfo en Anduva

El paso más importante está hecho. El Girona consiguió este jueves un triunfo vital en Anduva (1-2) para resurgir, aunque eso no significa que salga del descenso ni que aun siga sufriendo más de la cuenta. Eso sí, los de Míchel Sánchez dejaron atrás los problemas que los han hundido en la zona baja de la clasificación. Los rojiblancos ya golean.

Los tantos de Nahuel Bustos y Santi Bueno en la primera parte sirvieron para sumar los tres puntos y terminar con una racha de tres derrotas consecutivas. Al delantero cedido por el Manchester City, incluso, le anularon un gol por un fuera de juego milimétrico. El jugador de Bàscara, Roger Brugué, disparó las dudas en el tramo final con un gol que estuvo a punto de aguar la fiesta si no fuera por las manos de Camello que invalidaron el empate de los de Lolo Escobar.

Tres centrales

Después de la considerable mejora del equipo a pesar de la derrota contra el Huesca, Míchel mantuvo el once con la defensa de tres centrales. Le costó al Girona entrar en el partido, incomodado por el conjunto local aunque sin peligro. Un gol anulado a Bustos por fuera de juego se convirtió en el punto de inflexión que necesitaban los gerundenses.

Y es que en cuestión de tres minutos llegarían los tantos del argentino y Santi Bueno (min. 25 y 28) que servirían para llevarse la victoria. Los rojiblancos dominaron hasta los minutos finales, cuando Brugué hizo saltar las alarmas recordando distancias en el 80. En el añadido, el VAR anuló un gol por manos al Mirandés que hubiera significado el empate. El Girona respira por fin.