París-2024 quieren ser los Juegos Olímpicos de la revancha

Francia, París, ya ha tomado el relevo de la torturada ciudad de Tokio, que, como reconoció el gran Sebastian Coe, presidente de World Athletics, “ha dado un ejemplo tremendo al mundo y, por tanto, deberemos estarle eternamente agradecidos por el esfuerzo que han hecho al organizar unos Juegos Olímpicos en estas durísimas condiciones y que fuesen un éxito”.

Es evidente que el movimiento olímpico, de la mano del COI, pero, fundamentalmente, de la mano de Francia, liderada por su presidente Emmanuel Macron, presente en Tokio-2020, y de la alcaldesa española de París, Anne Hidalgo, quieren convertirse, a partir de hoy, en la gran esperanza para que París-2024 sean los JJOO de todos, abiertos, igualitarios, ‘low cost’ y, sobre todo, modernos, participativos y muy, muy, de la ciudad, de su gente, en el más puro estilo de Barcelona-92, organización en la que los propios francesas reconocen haberse inspirado e informado.

JJOO 'low cost'

París-2024, que serán inaugurados el siguiente fin de semana de que concluya el Tour, ha decidido que los próximos serán los JJOO de la igualdad y la diversidad. Con 4.585 millones de dólares de presupuesto, después de haber reducido recientemente 300 millones de gastos y, por tanto, muy lejos de los de Londres-2012 con 14.950 millones de dólares y de los 15.840 millones de Tokio-2020, la Ciudad de la Luz, que en esos días celebrará el Centenario de sus primeros Juegos en 1924, quiere que toda la ciudad y, muy especialmente, sus lugares más populares, icónicos, turísticos y más visitados formen parte del calendario olímpico y, sobre todo, vivan con intensidad este evento deportivo, económico y social.

París-2024 contará con 10.500 atletas, 592 menos que Tokio-2020 y, por vez primera, tal y como reconoció Thomas Bach, presidente del COI, en diciembre pasado, “la participación será exactamente la misma en hombres y mujeres”. En ese sentido, París-2024 se ha propuesto, no solo con las nuevas disciplinas como surf, cuya competición se celebrará en Tahití, la isla más grande de la Polinesia francesa, a 15.700 kilómetros de París, escalada, skateboard o el nuevo breakdance, acercar el programa olímpico al público más joven.

Habrán muchas sorpresas

Estos serán los sextos Juegos Olímpicos que organiza Francia pues a los tres parisinos de verano deben sumarse los invernales de Chamonic-1924, Grenoble-1968 y Abertville1992. Nadie quiere, de momento, desvelar los grandes secretos y sorpresas que prepara París-2024, pero todo el mundo sabe que la ciudad entera será un gran escenario. No hace mucho, el triple medallista olímpico en piragüismo, Tony Estanguet, alma de la organización, tuvo que disimular cuando una televisión le preguntó si era cierto que podríamos llegar a ver, en la ceremonia inaugural, desfilar a las delegaciones olímpicos por los Campos Elíseos.

Lo que sí es cierto es que el equipo de Estanguet y la dinámica y simpática Hidalgo quieren que París entero viva, durante 15 días, la magia olímpica y la gente, parisinos y visitantes, disfruten, por fin (se supone), de unos Juegos liberados ya de la pandemia. De ahí que lugares emblemáticos como la Tour Eiffel, que ya está siendo protagonista como mástil de la bandera olímpica, los mismos Campos Elíseos, Versalles, el Louvre, Los Inválidos, Trocadero, la isla de Saint Louis e, incluso, el vertedero que albergará la competición de BTT, luzcan con la luz de la capital francesa.

No es descartable, lo que sería realmente único e inigualable, que la organización acabe convirtiendo en realidad un sueño, en principio, virtual, de celebrar la final icónica de los 100 metros lisos sobre un tartán flotante sobre las aguas del río Sena, imagen, montaje que muchos ya han visto y elogiado. Es evidente que París-2024 ha entrado ya en la fase de decisión y en el momento de descartar o poner a prueba muchas de sus ideas, todas ellas destinadas a reforzar la ilusión y el objetivo de que sus JJOO se conviertan en la auténtica revancha, sobre todo a nivel de público, participación y complicidad que, por desgracia, no ha podido tener la competición japonesa.

Maratón popular

En ese sentido, la idea que sí se ha decidido llevar a la práctica y que es, sin duda, otra demostración de la decidida intención parisina de involucrar a todo el mundo en su fiesta es la celebración de diversos maratones populares paralelos a la maratón olímpica del último día de competición, con participación de miles y miles de atletas aficionados a lo largo de diversos circuitos.

“Con este evento, una maratón popular masiva, paralela a la que decidirá las medallas olímpicas, París invita a la gente de toda Francia y visitantes a inspirarse de la mentalidad atlética y los valores olímpicos e integrarlos en la vida cotidiana”, señala una fuente de la organización francesa. “Para permitir que la mayor cantidad posible de gente pueda compartir esta experiencia única y sobresaliente, ofreceremos distintos formatos de carreras para todos, ya sean atletas populares experimentados o principiantes, con o sin discapacidades, jóvenes o no tan jóvenes”.