El mal de altura del Atlético

Como si estuviera obligado a reducir su ritmo de ascensión ante la escasez de oxígeno en el ambiente, el Atlético ha frenado una trayectoria que iba para histórica: en las 19 primeras jornadas de La Liga hizo una marca estratosférica  de 50 puntos sobre 57 posibles, gracias a dos rachas de siete y ocho victorias (interrumpidas por la derrota en el derbi ante el Madrid). Entonces llegó a tener 11 puntos de ventaja, más de lo que nunca ha remontado un equipo para ganar La Liga, pero a partir de ahí, ha sumado más empates que victorias (4 y 3), además de la segunda derrota del curso liguero. 

Mientras tiene que lidiar, entre otros problemas y ciertas virtudes (como los goles de Luis Suárez, el despliegue constante de Llorente o el despertar de Lemar), con la progresión, o no, de la carrera de Joao Félix bajo el influjo de Simeone; las diferencias ligueras se han reducido hasta los seis puntos con el Real Madrid, y el Barça está a una victoria, este lunes ante el Huesca, de acechar a cuatro puntos del liderato. El equipo de Simeone se ganó el derecho de tener muchas oportunidades en esta liga, pero está empezando a desecharlas con demasiada frecuencia, la última este sábado.  

Partido a partido

«Nosotros intentamos seguir nuestro camino, con nuestro trabajito, despacito, partido a partido, sabiendo que tenemos dos monstruos detrás que tienen la ilusión de llegar a donde estamos nosotros», proclamó Simeone, siempre propenso a su papel de laborioso guía de una heroicidad,  tras el último empate sin goles ante un Getafe que no le ha marcado en 10 años y que, esta temporada, vaga por la zona baja .  

Aunque jugó con un futbolista más durante los 20 minutos finales, aunque Simeone se fue satisfecho con el despliegue de su equipo: «El primer tiempo fue regular y el segundo tiempo fue bueno: me gustó cómo atacó el equipo, fue agresivo y el portero rival hizo un gran partido», dijo con algo de satisfacción el entrenador argentino; y aunque protagonizó algo parecido a un asedio final (el mismo que le permitió remontar y ganar al Real Madrid ante el Elche), el Atlético no fue capaz de ganar. «Empatar y ganar siempre es un resultado positivo, no valoro que un empate sea malo», dijo Simeone con la cabeza en lo que viene por delante.  

Obligado a remontar

A dos días de la resolución de su eliminatoria de Champions ante el Chelsea, con la obligación de remontar el 0-1 de la ida, el entrenador argentino dijo que las sensaciones son «fantásticas». «Vamos primeros en La Liga, jugando bien en muchos partidos complicados en poco tiempo… Los chicos están respondiendo muy bien», comentó del pasado reciente, aunque la lucha por el título se ha comprimido más de lo que se podía esperar a finales de 2020. 

Lo que le queda al Atlético después de la Liga de Campeones, todavía con 11 jornadas por disputar, será visitar al Barça en el Camp Nou, además de dos partidos seguidos en Sevilla y otro en Bilbao, cuatro salidas marcadas con rojo en el calendario.