LA NUEVA COMPETICIÓN

La FIFA entra en guerra contra la Superliga europea

El organismo internacional y las seis confederaciones emiten un comunicado en el que anuncian que prohibirán la participación en sus competiciones a aquellas entidades y futbolistas que jueguen en la Superliga, entre ellas el Mundial y la Eurocopa

The Times divulga un borrador del proyecto de competición, que estaría formado por dos grupos de 10 equipos y con los cuatro primeros clasificados para la fase final de cruces

Detrás del torneo, que reemplazaría a la Liga de Campeones, aparece un banco de inversiones que regaría con al menos 700 millones a los 15 clubs fundadores

Gianni Infantino, presidente de la FIFA.

Gianni Infantino, presidente de la FIFA. / REUTERS / AMD WIEGMANN

Albert Guasch

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Los llamados rectores del fútbol no se han quedado de brazos cruzados a la espera de que se forje la Superliga europea. La competición privada que planean los gigantes del fútbol continental va sumando adversarios y voces críticas, pero posiblemente nunca hasta ahora había encontrado un frente común tan resuelto y poderoso. 

La FIFA, en alianza con las seis confederaciones del mundo, incluida la UEFA, divulgó este jueves una carta en la que expresaba su firme oposición a la NBA del fútbol en ciernes. La misiva iba incluso más allá y lanzaba una inequívoca amenaza: todos aquellos clubs y jugadores que participen en la susodicha competición quedarán excluidos de las citas que organizan los organismos del fútbol.

Con esta declaración, los mandatarios hacen rehenes a los propios futbolistas. Cualquiera que juegue con su club en la Superliga no podrá participar en un Mundial o en la Eurocopa. Sus ambiciones personales -jugar un Mundial suele cotizar alto en la lista de preferencias de los grandes cracks- quedan encajonadas en la disputa que se avecina entre FIFAy UEFA frente a la élite de los clubs.

Las conversaciones entre las entidades continentales más nobles alrededor de una competición que suplante a la Liga de Campeones y les proporcione mayores ingresos llevan años tejiéndose, pero en los últimos tiempos parece haber cogido impulso. Josep Maria Bartomeu se despidió de la presidencia del Barça aceptando la invitación a formar parte del torneo. Esta semana Florentino Pérez, reconocido como uno de los impulsores del proyecto, se reunió con AndreaAgnelli, de la Juventus, para abordar el tema. Encima, The Times divulgó este jueves un borrador de cómo se plantea la Superliga.

Tres clubs españoles

Todo ello parece haber motivado la contundente misiva de la FIFA y las confederaciones, que encontraron respaldo en Javier Tebas, presidente de la Liga y uno de los más públicos y constantes opositores a la idea. «La FIFA sabe el daño que este proyecto haría al ecosistema del fútbol actual», dijo. Joan Laporta y Víctor Font se han mostrado en principio receptivos, aunque con precauciones. "Puede ser pan para hoy y hambre para mañana", afirmó recientemente Laporta.

Según el borrador del diario inglés, la Superliga se disputaría en dos grupos de 10, con partidos de ida y vuelta, y los cuatro primeros equipos de cada grupo se enfrentarían en cruces hasta la final. Hay 15 clubs como fundadores, seis de ellos ingleses y tres españoles, tres italianos, dos de Alemania y uno de Francia. Habría invitaciones para otros cinco. 

Detrás se encontraría el banco de inversiones JPMorgan Chase que aportaría 3.500 millones a los 15 clubs para infraestructura o cubrir las pérdidas por el covid. Solo por participar, recibirían otros 350 millones . Habría que sumar otros ingresos por televisión o patrocinio. Se estima un pastel de 700 o 800 millones por club. Mucha tentación que la FIFA quiere evitar a toda costa.