POR EL COVID-19

La lógica e inevitable derrota del negocio y del COI

El organismo asume que se posponga la cita hasta el 2021 lo que abre un incierto panorama económico en Japón

Dos personas frente a la sede del gobierno metropolitano de Tokio.

Dos personas frente a la sede del gobierno metropolitano de Tokio. / periodico

Marcos López

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Se dio cuatro semanas y a los dos días el COI (Comité Olímpico Internacional) asumía lo inevitable. Que el negocio, por mucho dinero que muevan unos Juegos, no siempre  lo es lo primero. Eran tan lógica como inevitable esa derrota, por mucho que los dirigentes del COI pensaran y dijeran lo contrario.

1.- Impacto negativo de 5.500 millones en el PIB japonés

Contratos de derechos televisivos deben ser reajustados, acuerdos de patrocinio a nivel planetario también, venta de entradas.... Japón había invertido 11.000 millones de euros en la organización de los Juegos. El nuevo estadio olímpico de Tokio, que se inauguró este pasado mes de enero, ha costado 1.310 millones de euros y su manteniemiento anual es de 20 millones, asumidos, por supuesto, por los organizadores, mientras el COI debe revisar los contratos con las cadenas televisivas, que son el gran soporte económico en el que se apoya.

La NBC estadounidense pagó 7.100 millones de euros por hacerse con la exclusiva de los Juegos hasta el 2032, mientras Discovery, empresa que posee Eurosport, invirtió 1.300 millones por quedárselos hasta el 2024. Estudios económicos japoneses sitúan en 5.500 millones de euros el impacto negativo total en el PIB del país este año.

2.- Varias sedes podrían no estar disponibles

Tenía todo preparado Japón para acoger los Juegos este verano hasta que llegó el coronavirus, pero ahora debe cambiar el plan. "Una serie de lugares críticos necesarios para los Juegos ya no podrían estar disponibles", anunció Thomas Bach, el presidente del COI, en una carta pública a los deportistas cuando todavía se resistía al aplazamiento.

"Las situaciones con millones de noches ya reservadas en hoteles son extremadamente difíciles de manejar, y el calendario deportivo internacional para al menos 33 deportes olímpicos tendría que adaptarse", recordó también el máximo responsable del organismo olímpico antes de claudicar, preparándose para lo que él mismo calificó de «muchos desafíos».

Está obligado el comité organizador japonés y el COI a armonizar el calendario para  disponer de todas las instalaciones. Tokio y otras ciudades que acogerán pruebas cuentan con 40 sedes que prácticamente ya están listas para su uso, entre ellas ocho nuevos recintos de carácter temporal.

3.- Vendidas casi 1.000 viviendas de la Villa Olímpica

Cerca de un millar de las 5.600 viviendas de la Villa ya han sido vendidas en una primera fase que contó con una demanda abrumadora, según sus gestores inmobiliarios, que han decidido posponer la venta de una nueva tanda de pisos que estaba prevista para este mes. El retraso de los Juegos empujaría adelante en el calendario los trabajos de renovación previstos en estos inmuebles y supondría incumplir las fechas de entrega fijadas para sus nuevos propietarios, además de aparcar otras proyectos de infraestructuras previstos en la zona por el Gobierno Metropolitano de Tokio.

"Tendremos que ver qué hacer con la Villa Olímpica, porque es un tema que afecta a la planificación urbanística de Tokio", aseguró  la gobernadora de la capital, Yuriko Koike, quien también señaló que la cuestión de los pisos ya colocados "se deberá resolver entre los agentes inmobiliarios y los particulares". Los nuevos dueños deberán esperar más de un año para tener sus casas compradas.