EL EUROPEO DE WATERPOLO

Los penaltis abren a España la puerta de las semifinales

López Pinedo detiene dos lanzamientos y el equipo de David Martín elimina a Serbia tras un gran partido que acabó en tablas

López Pinedo celebra una parada en el encuentro que llevó a España a las semifinales

López Pinedo celebra una parada en el encuentro que llevó a España a las semifinales / periodico

Luis Mendiola

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Los buenos tiempos han regresado al waterpolo español. Y lo han hecho para quedarse. Ya no hay dudas. La selección de David Martín se plantó en las semifinales del Europeo de Budapest y peleará por las medallas, igual que hizo en el Mundial del pasado verano en Gwangju, donde fue segunda y hace dos años en el Europeo de Barcelona, donde se colgó la plata.  

El triunfo de España llegó en un soberbio encuentro ante Serbia, el auténtico coco de este deporte en los últimos años y vigente campeón olímpico. La selección se impuso en la tanda de penaltis (9-10), después de que el encuentro concluyera con empate a seis, con una actuación decisiva del guardameta Dani López Pinedo, que detuvo dos de los cinco lanzamientos, y dio la opción al conjunto español de sentenciar y tomarse la revancha de lo que ocurrió en el Europeo, donde fueron los serbios los que se llevaron el triunfo en la final desde los cinco metros.

Perrone, Adrià Delgado, Larumbe y Granados, por este orden, (solo falló Munarriz) transformaron sus lanzamientos y abrieron las puertas de la semifinal para los hombres de David Martín, donde se cruzarán este viernes con Croacia para emular la gesta de la selección femenina que consiguió 24 horas ante Grecia su pase a semis. Filipovic, Aleksic y Cuk fueron los que transformaron las penas máximas para Serbia.

"La única manera de ganar a estos monstruos de Serbia es hacerlo todo perfecto. Hemos jugado demasiadas finales y hemos perdido con ellos dos a penalties, la de Roma y la de Barcelona. Al menos ganarles una. Estamos entre los cuatro mejores de Europa. Hemos demostrado que hemos venido a tope y a por todas", valoró López Pinedo.

Ocho minutos mágicos

Un espléndido segundo cuarto puso los cimientos del triunfo de España. En esos ocho minutos se condensaron algunas de las mejores virtudes del equipo de Martín, el artífice de la reconstrucción vivida en los últimos años. La consistencia defensiva,  la solvencia de López Pinedo, apodado ‘el Muro’ no sin razón; la velocidad y la movilidad del ataque español y la pegada de alguno de los jóvenes talentos que está incorporando Martín, como Bernat Sanahuja, el joven talento del CN Terrassa, que se destapó en cuartos con dos golazos de lanzamiento lejano que ayudaron a construir un parcial de 4-0 con el que el cuadro español dio la vuelta a un encuentro que arrancó con malas sensaciones para sus intereses.

Serbia empezó el cruce de cuartos de final de forma arrolladora y se avanzó con dos tantos de Mancic, recortado por un lanzamiento poderoso de Granados. Pero ese parcial dio un vuelco radical al guion de la eliminatoria. No solo en el resultado, que permitió a España a abrir una brecha inesperada en el descanso (3-5) sino también en las sensaciones, con los jugadores de Martín blindados en su confianza. En la reanudación la portería se cerró para el equipo español, que solo encontró esperanza en un gol de Perrone, mientras Serbia se adueño del juego, pero a pesar de sus esfuerzos, chocó una y otra vez contra López Pinedo, el héroe de la victoria.  

"Nosotros no tenemos quizás su calidad individual pero hacemos un sistema y un trabajo el grupo que es lo que nos da fuerza. Tenemos el sueño de intentar ser campeones y hay que seguir", se congratuló el capitán Felipe Perrone. 

Serbia: Pijetlovic, Mandic (3), Dedovic, Randjelovic (1), Cuk (2), Pijetlovic, Vico, Aleksic (1), Jaksic (1), Filipovic (1), Pralainovic, Stefan Mitrovic y Branislav Mitrovic.

España: López; Munarriz, Granados (2), Sanahuja (2), De Toro, Larumbe (1), Delgado (1), Fernández (1), Tahull, Perrone (3), Mallarach, Bustos y Lorrio