"Estoy decepcionado", asegura Unzué tras su destitución en el Girona

Juan Carlos Unzué es el tercer entrenador que ha sido destituido en Segunda en tan solo un par de meses de competición. Los dos anteriores (Sergio Ejea y Juan Antonio Anquela) fueron cesados estando sus respectivos equipos (el Oviedo y el Deportivo) en zona de descenso. No es el caso del Girona, que transita todavía relativamente lejos del peligro, pero que se está descolgando de su objetivo real y único: el retorno a Primera.

Si el líder no se ha escapado ya definitivamente, poco le falta (el Cádiz tiene 15 puntos más). Y el club de Montilivi puede dar gracias que nadie ha seguido el ritmo de los andaluces y que la segunda plaza, también de ascenso directo, ahora del Almería, está a poco más de una victoria (a 4 puntos). Tiempo suficiente para reaccionar con todavía 90 puntos en juego.

Ya se sabía que la pasividad que tuvo el club el pasado año con Eusebio Sacristán (el área deportiva y la propiedad mantuvieron al entrenador en el cargo pese a perder nueve de los diez últimos partidos, cosa que condujo el Girona a Segunda A cuando la permanencia parecía más que hecha) no beneficiaría en nada a Juan Carlos Unzué. Y pese a que los resultados (la mitad de partidos se han saldado con derrota) posiblemente justificaban la decisión, el ya extécnico se mostró algo contrariado en la rueda de prensa de su despedida.

“No es un buen día”, admitió. “Y la mejor palabra para expresar lo que siento es decepcionado. Lo estoy con la decisión que se ha tomado y también por algunos resultados. Seguramente no se ha valorado que eso es muy largo. No se sube en octubre, sino en mayo. Pero también me siento muy tranquilo por haberlo dado todo, desde el primer día hasta ayer”, comentó el navarro.

Adiós a la plantilla

Unzué tiene previsto despedirse este miércoles de los jugadores antes de que Juan Carlos Moreno (miembro de su cuerpo técnico) tome el mando después de la decisión del club de mantener a todo el equipo de Unzué (solamente saldrá su hijo, Aitor) y de dar la batuta al exjugador Barça y el Numancia, entre otros equipos. Como primer entrenador, la experiencia de Moreno se reduce a tres temporadas en el Numancia B, en Tercera División.

“Han sido solo tres meses, pero muy intensos. La única queja que tengo es que los dirigentes no han tenido la paciencia que a mí me hubiera gustado. Pero solo eso. He encontrado gente fantástica a nivel profesional y personal y siento también que los jugadores me han seguido”, indicó el ya extécnico del Girona, que estuvo acompañado en su adiós por su cuerpo técnico al completo, por el capitán Àlex Granell (después se unieron Christian Stuani y Aday Benítez), por el presidente (Delfí Geli) y por el director deportivo (Quique Cárcel), que este miércoles valorará la decisión tomada por el club el lunes por la noche.

Pese a ser una destitución muy tempranera (jornada 12), no es Unzué el entrenador que menos ha durado desde que el Girona está en la Liga de Futbol Profesional. En el segundo año en Segunda División (temporada 2009/10), Cristóbal Parralo fue despedido en la jornada 9 cuando el equipo era penúltimo con siete puntos. Algo más duraron Ricardo Rodríguez (destituido en la jornada 18 del curso 2013/14) y Raúl Agné (cesado tras 20 partidos de la campaña 2011/12)