SENTENCIA

Condenan a un expresidente del Valencia por planificar el secuestro de otro

Juicio al expresidente del Valencia, Juan Soler por haber conspirado en 2014 para secuestrar al expresidente del club, Vicente Soriano.

Juicio al expresidente del Valencia, Juan Soler por haber conspirado en 2014 para secuestrar al expresidente del club, Vicente Soriano. / Miguel Lorenzo

Nacho Herrero

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Una fraudulenta venta de las acciones del Valencia entre dos expresidentes del club, ha acabado con el estafado, Juan Soler, condenado a dos años de cárcel por planificar el secuestro y un robo con violencia en casa de Vicente Soriano, que se declaró insolvente cuando el Tribunal Supremo le condenó a pagar 65 millones de esa transacción.

La Audiencia Provincial anunció este martes la sentencia, recurrible ante el Supremo y con un voto particular, y confirmó la veracidad de la grotesca operación que diseñó Soler junto a tres complices, uno de los cuales era confidente de la Policía. Fue él quien avisó a las autoridades de la inminencia del secuestro y ayudó a que se abortara y por eso su condena baja al año y un mes de cárcel.

Soler salió del Valencia en 2008 tras una decepcionante gestión y meses después pactó la venta a Soriano de su paquete accionarial, comprado a Paco Roig en un movimiento auspiciado por el gobierno del popular Francisco Camps. La idea de Soriano era revenderlo a un grupo fantasma, Dalport, que se evaporó cuando una ampliación de capital dejó sin valor real a esas participaciones.

La justicia confirmó la deuda de 65 millones de euros de Soriano con Soler que en 2013, convencido de que su deudor tenía millones de euros en paraisos fiscales, empezó a planificar con tres colaboradores un secuestro que debían llevar a cabo unos sicarios colombianos en el centro de València.

La idea era trasladar después a Soriano a Francia y una vez allí amputarle dedos u orejas para forzar a su familia a pagar. Tras participar en los preparativos, el confidente Rachid Behdaoui avisó a Soriano y a la Policía y grabó una última cita en la que los condenados confirmaron sus planes y Soler le dio el "ok". Aún así, después aseguró haber manipulado la grabación, algo que los agentes de la Policía negaron.