Zidane aún confía en que llegue una bomba

Después de la raquítica imagen ante el Valladolid (1-1), todo lo que no sea ganar con solvencia en Villarreal hará saltar todos los resortes del Madrid, aún con unas horas de mercado, con Zidane bromeando con bombas y con un partido que puede desatar un desastre que se veía venir y que nadie ha puesto medios para evitar.

Zidane está concienciado, no va a abandonar la trinchera, ni va a dejar a nadie atrás en la huida hacia adelante que está acometiendo el Madrid. “Si yo me quejara, debería cambiar de trabajo, todos los técnicos querrían entrenar a este equipo”, aseveró, aunque evitó dar una respuesta directa sobre cómo está la plantilla respecto a sus deseos cuando regresó al cargo, hace seis meses.

Un gran fichaje

El club transita por el mercado sin fichajes ni perspectivas, aunque con dinero, pese los 300 millones invertidos ya, y tiempo aún para moverse en el mercado, que cierra este lunes 2 de septiembre. Pero Zidane dejó la puerta abierta a una gran incorporación en lo que queda de mercado: “Hasta el lunes puede pasar de todo: una bomba, dos bombas…”, dijo entre sonrisas susceptibles de interpretación. 

Sería una operación necesaria, vista la confección de la plantilla, aunque en ningún caso arreglaría los problemas estructurales del equipo. La rumorología ofrece las posibilidades de Icardi o el portugués Bruno Fernandes, el sueño de Pogba sigue muy alejado de la realidad y la posibilidad de que llegue Van de Beek, con el que había un acuerdo cerrado, seguirá abierta hasta este lunes, pendiente de que alguien en el Madrid se decida a cerrar la operación. En el horizonte también resurge el nombre de Eriksen, dispuesto a salir del Tottenham, pero sin oferta blanca.

Lucas o Vinicus

Zidane vio trabajar sobre el césped antes de viajar a los lesionados Hazard y Rodrygo, aunque no podrá contar con ellos en Villarreal, tampoco con Asensio, Isco, James y Brahim. La situación vislumbra una decisión reveladora entre Lucas Vázquez o Vinicius, una reminiscencia del pasado contra la apuesta joven de renovación del club que el técnico parece no terminar de asimilar. La otra opción sería un cambio de sistema para que entre en el once Fede Valverde, el cuarto y último centrocampista de la plantilla. 

El técnico del Madrid confirmó que Keylor Navas estará en La Cerámica con el equipo, mantuvo la compostura un par de preguntas, pero terminó reconociendo la salida del portero hacia el París Saint-Germain: “Keylor va a estar con nosotros en el partido. Luego lo que va a pasar, va a pasar. Vosotros conocéis la situación, pero yo no voy a entrar en eso”, cerró la cuestión. 

Al inicio de la rueda de prensa, Zidane envió sus condolencias y las de todo el equipo y el club a Luis Enrique.