Emotiva despedida

Godin dice adios: "Me encantaría jugar aquí hasta los 40, como a cualquier hincha"

El central uruguayo anuncia que se marcha del Atlético camino al Inter de Milán tras no llegar a un acuerdo para renovar

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Alejandro García

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“Estoy más nervioso que ante un partido”, empezó Godín, fluido, pero pronto le embargó la emoción, las palabras no brotaban cuando llegó el anuncio: “Quería que supieran de mi boca que voy a jugar mis últimos dos partidos con el Atlético”.

No por esperada, la confirmación de la marcha del uruguayo es menos dolorosa para la afición rojiblanca, que ve cómo se despide un trozo del cholismo, un vestigio de un pasado reciente glorioso, un símbolo de la transformación del club, un pilar estratégico sobre el que se ha sustentado la era más exitosa de la historia del Atlético de Madrid.

“Me encantaría jugar aquí hasta los 40 años, como a cualquier hincha, pero no es posible”, reconoció en un momento de contención de las lágrimas de unos ojos que no dejaron de estar llorosos hasta casi al final, cuando posó para la foto con la plantilla y el cuerpo técnico que le acompañó.

Último partido en casa

Más 120 veces internacional con Uruguay, ganador de una Copa América y semifinalista de un Mundial, Godín quiso despedirse antes de jugar este domingo, ante el Sevilla, el último partido como local de los 382 que planea disputar con el Atlético de Madrid.  

“De lo que realmente me siento orgulloso del cariño que me demuestra la afición. Esto no ha sido solo un club para mí, ha sido mi casa y una forma de vivir. Me voy con el orgullo y la tranquilidad de que lo he dado todo por esta camiseta. Mucha gente me ha pedido que me quedara, hasta mi familia”, fueron las frases capitales, entre un agradecimiento constante, con las que Godín se despidió de sus 9 temporadas en el Atlético. “Nunca me imaginé que llegaría este momento, por eso no estoy preparado. Quería dar un mensaje de alegría, pero está siendo complicado, estoy muy emocionado, ayúdenme, por favor”, imploró en busca de un aplauso y unas risas que ayudaron a que el ambiente fuera más distendido.

La renovación frustrada

Ya con la prensa, más relajado, salvo en una respuesta sobre su familia, apareció el resquemor que hay en el ambiente por las informaciones de que el club podía haber hecho algo más para abordar su renovación, unas ideas que el protagonista quiso aparcar: “Lo primordial para mí siempre ha sido respetar el club y sus normas, solo tengo palabras de agradecimiento”, dijo en referencia a las renovaciones anuales que promulga el Atlético a los mayores de 30 años.

Junto a Juanfran, uno de los pocos pesos pesados de la plantilla presente en la despedida, después de estar de visita como público en el juicio del 'procés' y también en la puerta de salida tras una oferta de renovación insatisfactoria de la dirección rojiblanca; Koke y Saúl, el uruguayo era el uno de los últimos supervivientes de aquella plantilla deprimida, tras caer en la Copa del Rey ante el Albacete Balompié, que Simeone recogió en 2011 para llevarla al primer plano competitivo en Europa.

“Sería hipócrita decir que no lo hemos intentado, pero no hemos llegado a un acuerdo y se acabó la etapa más bonita de mi carrera y mi vida”, es todo lo que explicó sobre los motivos de su marcha que, a falta de oficialidad, será con destino al Inter de Milán.

Una Liga, una Copa, dos entorchados de Europa League y dos finales de Champions, entre los ocho títulos que ha celebrado, perfilan el historial de un futbolista que es historia viva del Atlético. “Nadie mejor que tú como ejemplo de coraje y corazón. Has sido pieza clave en los mejores años de nuestro club”, le reconoció el presidente Enrique Cerezo.