Eli del Estal, 'pichichi' del Espanyol: "Ya no nos ven como marimachos"

El lunes es el gran día. Por primera vez en la historia, el Espanyol femenino jugará en el mismo escenario que el equipo masculino. El RCDE Stadium abrirá sus puertas contra el Atlético, el favorito para ganar la Liga, en busca del récord de asistencia de Catalunya en un partido entre mujeres. Eli del Estal (Santander, 26 años) es la máxima goleadora de la plantilla perica. Lleva seis jornadas seguidas marcando y espera con emoción la gran cita de Cornellà. Recién llegada de la Universitat de Barcelona, en la que cursa un doctorado sobre género y deporte, charla con EL PERIÓDICO sobre su original camino y el ilusionante momento del fútbol femenino.

-¿Cómo está viviendo el vestuario la  cuenta atrás hacia la cita del lunes? Con muchas ganas y alegría. No esperábamos llegar al partido con tan buenos resultados. Estamos muy motivadas y en una buena dinámica desde la llegada de Salva al banquillo. Lo vemos como un día de fiesta y celebración del fútbol femenino para demostrar que estamos creciendo, que se están abriendo los estadios y funciona. El Espanyol ha sido muy grande pero por un motivo u otro se dejó de apostar por nosotras. Ahora se le está dando otra vez valor.

-¿En qué momento surge la idea de jugar por primera vez en Cornellà? Fue como una reacción de envidia sana. El Atlético de Madrid, el Athletic, el Betis y otros clubs con mucha afición estaban abriendo los estadios y aquí no se hacía nada. Queríamos ser como ellos. Estábamos un poco mal en este tipo de iniciativas y ahora nos estamos poniendo al día. Lo del Wanda fue una pasada. Al final nos sentíamos un poco como las pringadas porque nunca nos tocaba jugar cuando se abría un gran estadio. ¡Si no abríamos el nuestro parecía que no nos iba a tocar nunca!

«El lunes será un día de celebración. Queremos demostrar que estamos creciendo y deben apostar por nosotras»

-Llegan al partido a tope, con goleada al Rayo y una racha de cuatro victorias y dos empates en las últimas seis jornadas. Sí, durante la semana pasada lo hablamos mucho en el vestuario. Decíamos que no podíamos fallar en Vallecas para mantener ese subidón antes de jugar en Cornellà. Y ganamos por 1-5. Mejor imposible.

-Si ganan al Atlético regalarían la Liga al Barça. ¿Es una situación incómoda? ¡Buf! Tengo muchos amigos que están pesaditos con el tema. Te dicen 'con un empate todos contentos, el Barça no gana y vosotras ya seríais felices'. Pero nosotras vamos a ir a por la victoria, lo que pase después ya será cosa del Barcelona y Atlético.

-¿Qué ha mejorado en los últimos tiempos en el fútbol femenino? ¿Nota un cambio social importante? Lo más importante es que un patrocinador como Iberdrola ha apostado fuerte por nosotras y los partidos se retransmiten por televisión. La gente nos ve y se enganchan. Ese es el gran cambio. Y, luego, es evidente que hay un tema social, un movimiento feminista fuerte. Se respeta más el trabajo de la mujer y de las deportistas. Ya no nos ven como marimachos. Antes pensaban que las mujeres jamás podrían vivir del deporte, ahora al fin nos respetan. El deporte femenino gusta más y nos vemos favorecidas por ello.

«Muchos amigos me piden que no ganemos para no darle la Liga al Barça, pero saldremos a por la victoria»

-¿Sigue habiendo machismo? La realidad es que en el fútbol es donde mayor brecha salarial hay respecto a las hombres. El machismo sigue y seguirá, pero hay que dar pasos adelante para que cada vez haya menos. En los campos continúa habiendo insultos como el clásico 'vete a fregar'  o 'vete a la cocina', pero les está tocando más a las árbitras, que son más novatas en esto. Nosotras llevamos mucho tiempo. Hay que erradicar todos estos comportamientos, pero yo creo que es mejor quedarse con lo positivo. En los deportes minoritarios, como puede ser el fútbol femenino, parece que solo se habla para destacar lo malo.

-Diez goles, seis jornadas seguidas marcando, mejor jugadora de la Liga en el mes de marzo… ¿Es su mejor año? Es mi mejor momento deportivo desde que estoy en el Espanyol. Estamos disfrutando en el campo, nos lo pasamos bien y eso se nota. Es mi tercer año aquí y estoy viendo un juego que no había visto nunca. Me gusta ver a los pericos felices por nuestras victorias. Hasta la llegada de Salva estábamos un poco estancadas, era como darse contra un muro. Él ha supuesto un soplo de aire fresco.

-Antes del fútbol destacó en el atletismo en su tierra. ¿Cómo empezó todo? En el fútbol empecé muy tarde, a los 19 años, pero siempre he sido deportista. Todo comienza en Santander. Mi hermana gemela, Sara, y yo éramos muy hiperactivas. No parábamos quietas. Mi madre, Begoña, nos enviaba a correr para soltar energía. También jugábamos a baloncesto. Llegué a ser subcampeona de España júnior en 400 metros vallas. El atletismo me dio el espíritu de sacrificio, el saber que todo lo que uno quiere se puede conseguir.

-¿Cuándo se pasa definitivamente al balón? Aquí llega el turno de mi padre Nacho, que era muy pesado. Desde pequeñitas quería que probáramos y nunca le hacíamos caso. Un día dio la casualidad de que estábamos entrenando en las pistas y me llegó un panfleto informando de que jugaban las chicas del Racing contra el Barça. Y decidimos ir al partido. Me acuerdo de ver a Leila en la banda. El Racing estaba en zona de descenso, iba a cambiar de entrenador y mi padre me insistió en probar. Y allí fuimos.

«El machismo sigue y seguirá, pero hay que avanzar. En el fútbol se da la mayor brecha salarial respecto a los hombres»

-En el Racing coincidió con Pedro Munitis, el exjugador del Real Madrid. Así es. Recuerdo que en las pruebas Pedro me preguntó en qué equipo jugaba. Le contesté que en ninguno y alucinaba. Me dijo que me quedara, que nos veía mucho futuro. Así empezó todo. Mi padre me dio el primer empujón y Munitis fue el artífice. Pedro era muy disciplinado en todo: en la preparación de los partidos, las comidas, los descansos… Era muy profesional. Llegué a compaginar el fútbol con el atletismo un par de años hasta que el cuerpo dijo basta y me quedé con el balón. Estuve año y medio en el Racing, luego en el Albacete y ahora en el Espanyol.

Eli del Estal dando toques con la cabeza

-En Albacete grabó un curioso vídeo para La Liga dando 100 toques con lacabeza. ¿Cómo surgió esa idea? Los de La Liga querían hacer un vídeo divertido para promocionar el fútbol femenino y me dijeron que había gente que había hecho malabares con los pies. Yo pensé 'madre mía, como tenga que hacer toques con los pies menudo cuadro'. Entonces les dije que yo era buena con la cabeza. Me preguntaron cuantos toques podía hacer, si 20 o 30. Yo les dije que más. Hice una prueba y me salieron ciento y pico. Y acabaron grabando 100 toques justos con varias tomas diferentes. ¡Vaya mareo!

-¿Tiene algún ídolo? Siempre me ha gustado mucho Aduriz. Es un gran cabeceador y tiene mucho espíritu de sacrificio. El Athletic es un equipo con el que empatizo mucho. En el fútbol femenino admiro a Jenni Hermoso, que para mí es el Messi de las chicas. Es una jugadora espectacular que marca la diferencia. Te los mete de todas las maneras. Es una máquina absoluta.

«En el fútbol empecé muy tarde, a los 19 años, gracias a mi padre y a Munitis. Antes fui subcampeona de España de 400 metros vallas»

-¿Sueña con ir a la selección? Nunca me había planteado eso. Hace dos semanas me lo preguntaron por primera vez y pensaba que era una broma. Es un desafío muy difícil. El nivel de las delanteras en España es buenísimo. Creo que ya se quedarán fuera del Mundial jugadoras importantes. Yo espero seguir disfrutando y marcando goles. Y en el futuro ya se verá lo que ocurre.