España, o el lenguaje del balón para gobernar el fútbol femenino

Antes, España admiraba a las potencias del fútbol femenino. Ahora, en cambio, es admirada porque ha construido un "estilo de toque y fútbol combinativo", como recuerda Toña Is, la primera mujer en ser campeona del mundo uniéndose al selecto grupo que completan dos hombres: Iñaki Saéz guió a la joven España sub-20 de Xavi y Casillas a la primera cima en Nigeria (1999) conquistando aquel Mundial, prólogo del paraíso que pisó la selección de Vicente del Bosque en Suráfrica (2010).

"Desde luego que tenemos un estilo, todo el mundo lo ve, todo el mundo lo sabe. Aplicamos el mismo lenguaje a las selecciones inferiores", explica Toña. Es el lenguaje del balón, mimetizado, por supuesto, de la época dorada de 'La Roja'. 

"El fútbol femenino se ha ganado el respeto y un espacio. No es un tema de igualdad, ellas se lo han ganado con sus triunfos" (Pedro López, seleccionador sub-20) 

"El fútbol femenino se ha ganado el respeto y un espacio en los medios de comunicación. No es un tema de igualdad ni de nada", argumenta también Pedro López, el técnico que llevó a España al subcampeonato del mundo sub-20. "Ellas se lo han ganado con sus triunfos. Cada vez que alguien las ha visto jugar las han admirado", apunta el seleccionador, recordando que "es admirable el trabajo que están haciendo todos los clubs en el fútbol-base". 

"Tipología de jugadora"

España tiene un estilo, que le permite dominar Europa ("somos primeras en el ranking de la sub-17 y sub-19", precisa López) además de gobernar el mundo del fútbol femenino en las categorías inferiores. "Como diríamos en Asturias, es un fútbol guapo de ver, te pilla y te atrapa", subraya Toña, recordando que se ha producido una revolución gracias a la detección del talento.

"El gen del país ha provocado que salga una tipología de jugadora en concreto", revela el seleccionador sub-20, apuntando, al mismo tiempo, a otras de las claves de ese éxito. "Hay una estructura de selecciones autonómicas que es admirada en todo el mundo, ahora tratan de imitarla", dijo López. "Somos capaces de tener controladas y localizadas a todas las jugadoras, estén en la Sierra, en los Pirineos, en Cádiz o en un pueblo con chicos".

"Las niñas vienen mucho mejor preparadas de sus clubs, son mucho más competitivas" (Toña Is, seleccionadora sub-17) 

Una "tipología", obviamente, "influenciada por lo que han visto en el éxito del masculino, el típico Xavi e Iniesta y su forma de jugar". Son, según Jordi Ventura, técnico del Barça femenino, hijas de "aquellas pioneras como Vero Boquete, Sonia Bermúdez, Vicky Losada, Marta Torrejón, Ruth García...". Mujeres que abrieron la senda actual.

"Cuando empezamos veíamos a las selecciones nórdicas como unos monstruos inalcanzables, que nos podían golear", admite López, explicando que eran aquellos años en que caían derrotadas "por el físico de Suecia, Noruega, Alemania... Al final te acababan pasando por encima en los duelos o en los últimos minutos de los partidos".

Ahora todo ha cambiado.Manda el balón, se han equilibrado las fuerzas ("las niñas vienen mucho mejor preparadas de los clubs, son mucho más competitivas", cuenta Toña) y España impone su lenguaje.

"Es un juego que te atrapa porque es de toque, combinativo y ellas, además, disfrutan".

"Es una barbaridad lo que está pasando. Quieren jugar a fútbol, ya no es jugar por jugar, ya no es un hobby" (Jordi Ventura, técnico Barça femenino) 

Disfrutan tanto que las jugadores no entienden el fútbol de otra manera. "A veces, les decimos: '¡Vamos ganando, queda poquito! ¡Riesgo cero! Pero ellas no cambian su manera de jugar nunca. Lo tienen tan ininteriorizado que siguen arriesgando aunque le digamos que no lo hagan", admite Toña. "En este Mundial me ha pasado, pero se sienten  seguras, creen en ello y les gusta", añade.

"Ven que hay futuro"

La revolución ha empezado por la base. "Es una barbaridad lo que está pasando", admite asombrado Ventura. "Las niñas quieren jugar a fútbol y ven, además, que hay futuro. Que no es jugar por jugar. Ya no es un hobby porque las que están subiendo ven que se está profesionalizando todo, primero en la elite y luego en el fútbol base", asegura el técnico azulgrana, recordando que hay un arco generacional ("desde la de 1998 al 2003") que agura estabilidad en el éxito.

"Todas están viendo que existe un futuro que hace cinco años no se podía detectar", argumenta para avalar que tres títulos (Europeo sub-17, Europeo sub-19 y Mundial sub-17) son, en realidad, el premio al trabajo bien hecho en toda la estructura. Sin olvidar, claro, el subcampeonato mundial sub-20. ❡

"Tampoco somos de verdad muy conscientes de lo que ha pasado. No sé las niñas, pero yo no tengo todavía esa sensación. A veces, lo piensas y dices:'¡Somos campeonas del mundo!' Pero luego te cuesta créertelo...", reconoce Toña.