España golea a Israel (11-5) en el partido del boicot

El partido oficial de waterpolo femenino entre España e Israel, que inicialmente debía jugarse este martes en Molins de Rei y que ha sido boicoteado por la CUP de este municipio, se ha disputado finalmente en la piscina del CAR de Sant Cugat, con una clara victoria local (11-5) y a puerta cerrada, aunque han podido 'colarse' una veintena de seguidores partidarios del Estado de Israel. En el conflicto tuvo que intervenir la FINA (Federación Internacional de Natación) y se alcanzó un acuerdo de última ahora con las autoridades israelís, que no contemplaban el cambio de escenario y que eran partidarias de cancelar el encuentro. La protesta israelí había causado un problema de carácter diplomático entre los Gobiernos de Madrid y Tel Aviv. 

Por 'streaming'

"Para evitar que los aficionados se quedarán sin ver el encuentro -indicó la federación española-, se ha retransmitido por 'streaming live' desde la plataforma de LaLiga4Sports, 'partner' de la RFEN". La ministra de Cultura y Deporte israelí, Miri Reguev, había solicitado a su homólogo español, José Guirao, que intercediera en el partido y reclamado que el encuentro se disputase en Molins de Rei. Israel no era partidario de jugar a puerta cerrada. Las jugadores de este país se encontraban desde el pasado fin de semana concentradas en el CAR de Sant Cugat, al igual que las internacionales españolas.

La protesta

"Los movimientos BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones) -que apoyaba también el boicot de la CUP- son claramente antisemitas en su naturaleza y operan para dañar al Estado de Israel y a sus ciudadanos", había protestado en un escrito la ministra Reguev a Guirao. El Gobierno israelí, inicalmente, no contemplaba otra opción diferente a que el encuentro se celebrase "en el plan original". De ahí que haya sido clave la intervención de la FINA.

El partido había sido programado en Molins de Rei, después de las gestiones realizadas por el Club Natació de esta localidad. Las instalaciones, con una piscina de 50 metros, son de carácter municipal y la CUP, al igual que ERC, tiene representación en el gobierno de este municipio desde que en otoño del año pasado se rompiera el pacto entre Convergència y el PSC, pasando el partido socialista a la oposición. 

"Hace tres semanas -cuentan desde la oposición municipal- se tuvo conocimiento del partido y el lunes de la semana pasada la CUP, apoyándose en una moción del 2013, contraria a Israel por unos ataques de la época a Cisjordania, reclamó el boicot y se mostró adversa a la celebración de este partido". El Gobierno municipal dio carta blanca a la petición de la CUP.

El no de Barcelona

El pasado viernes, el Consulado de Israel tuvo conocimiento del rechazo de Molins de Rei, mientras el Club Natació mostraba su enfado por mezclarse política y deporte, en un duelo de waterpolo que, debido al aforo de las instalaciones, apenas podían presenciar en directo unas 300 personas. La primera opción como cambio de escenario era la piscina Sant Jordi de Barcelona. "Pero la CUP de Molins de Rei se puso en contacto con la CUP de Barcelona por lo que también se confirmó el rechazo barcelonés", indican las mismas fuentes.

Desde Israel, Revital Cohen Gluska, presidenta de la Asociación de Waterpolo israelí, había dado por "cancelado" el partido, a pesar de las disculpas recibidas por el presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco.