Ronaldo, fenómeno también en el palco

No se sabe si este sábado Florentino Pérez también le pedirá una foto como ya han hecho recientemente muchos de sus colegas. Ya es costumbre que cuando Ronaldo, el ‘Fenómeno’, pisa la zona noble del viejo Nuevo Zorrilla, un estadio construido para el Mundial de España-82, se le acerquen los presidentes reclamando un documento gráfico de recuerdo junto a uno de los mejores delanteros centro de la historia del fútbol mundial.

Hace 10 meses no quiso comprar el Valladolid. En verano invirtió 21 millones de euros para tener el 51,05% de las acciones

Ahora, en cambio, es el nuevo dueño del Valladolid, un club que compró por 21 millones de euros a finales de este verano quedándose con el 51.05% de sus acciones. Es la estrella de la ciudad, ocultando detrás de su carismática sonrisa el inmenso trabajo de Sergio González, el técnico del milagro. Llegó a Pucela cuando quedaban ocho jornadas para acabar la Segunda División y el equipo era décimo guiándole de forma metéorica al ascenso a Primera sin sufrimiento alguno. Ronaldo tomará asiento en el palco del Bernabéu, junto a Florentino, el presidente del Madrid que lo fichó en el 2002 para reunirlo en una colección de cromos galácticos junto a Zidane, Figo (y luego Beckham).

Es el primer ‘viaje’ del exdelantero acompañando a su equipo. En realidad, no se mueve de casa. Vive en Madrid, donde el Valladolid dispone ya de una oficina del club, empeñado como anda en dotarle de una universalidad que nunca había tenido antes. Llevaba tiempo tramando adquirir un club. Hace 10 meses, sin embargo, no vio claro quedarse con el club pucelano. Tampoco atendió la llamada de un par de equipos de Segunda que reclamaban su atención empresarial.

Apenas 1.5 millones de € en fichajes

Acabó el verano y se transformó en el propietario de un club recién ascendido a Primera, que aprovechó el dinero del ascenso para liquidar su deuda, invirtiendo apenas 1.5 millones de euros en fichajes: un millón en quedarse en propiedad a Alcaraz, del Girona, y medio millón para lograr la cesión de Duje Cop, procedente del Standard de Lieja. Llegó Ronaldo y negoció con Carlos Suárez para adueñarse del Valladolid.

"Nos pone en el mapa como club, como persona, como ciudad y como provincia" (Suárez, presidente ejecutivo Valladolid)

"Llevaba 17 años en el club, es el momento para retirarse a los cuarteles de invierno, llega la persona ideal. Nos pone en el mapa como club, como persona, como ciudad y como provincia", dice el ahora presidente ejecutivo vallisoletano. "El que manda es él", precisa. Y manda mucho Ronaldo. Tiene el club en la cabeza. A sus 42 años, ha conocido todas las aristas del negocio. Primero en el campo. Cuando jugaba descubrió las promesas incumplidas de Núñez, los litigios con Massimo Moratti, el multimillonario italiano que tenía el Inter, y tuvo también sus diferencias con Florentino.

"En este lado del fútbol se trabaja muchísimo más y se cobra mucho menos" (Ronaldo)

Ahora lo verá en el palco. "En este lado del fútbol se trabaja muchísimo más y se cobra mucho menos", bromeó el brasileño en una conferencia sobre el futuro de este deporte organizada en Madrid hace apenas un mes.

Flechazo instantáneo

No está a diario en Valladolid (va a los partidos, acude,  eso sí, por sorpresa a comidas de la plantilla, debate con peñistas…), pero es como si  no saliera de la ciudad, que ha vivido un flechazo instántaneo con el ‘Fenómeno’. Pucela está enamorada de su sonrisa. Y de su carisma. El equipo, también. Y Sergio, aún más. Perdió en el tiempo añadido en la cuarta jornada un partido en casa. El Alavés de Abelardo se llevó el triunfo con un gol de Ibai en el minuto 93. Llevaba el Valladolid dos puntos de 12 posibles, confinado al sótano de la clasificación, ocupando la penúltima posición.

Entonces, bajó Ronaldo al vestuario y renovó a Sergio hasta el 2020. Era un mensaje de que los tiempos estaban cambiando. El mismo equipo de Segunda, más las cesiones gratuitas de Verde (Roma) y Enes Ünail y Leo Suárez (ambos del Villarreal), no parecían suficiente argumento. Pero el ‘Fenómeno’, que estudió gestión durante un par de años en Londres, lo veía de otra forma.

"¡Tú que crees! Me compro un equipo y me voy ahora de vacaciones… ¡Tú que crees! Hay mucho trabajo", dijo Ronaldo sonriendo a un periodista pucelano en el Ayuntamiento de la ciudad cuando se presentó como máximo accionista del club. Mantuvo y solidificó de tal manera Ronaldo la figura del entrenador que impulsó al Valladolid. A partir de ahí, un viaje meteórico hacia la aristocracia de la Liga (del penúltimo lugar al sexto en la clasificación), mientras los presidentes de otros clubs no paran de pedirle fotos.

Local + global

Trabaja en silencio (apenas concede entrevistas) intentando mantener un perfil de propietario alejado de la rutina diaria, tal si fuera el dueño americano del Manchester United o el jeque Mansour Bin Zayed, que posee el City de Guardiola. Solo ha hablado con ‘El Norte de Castilla’, ese histórico diario vallisoletano que fue dirigido en su día por el escritor Miguel Delibes, y pronto aparecerá en ‘The New York Times’.

Trabaja en silencio, apenas concede entrevistas. Solo dió una a 'El Norte de Castilla' y otra que saldrá pronto en 'The New York Times'

Lo local y lo global, síntesis de esas cuatro palabras ("competitividad, transparencia, revolución y acciones sociales") que pronunció en su toma de posesión en el Ayuntamiento de Valladolid. "Esos son mis pilares trabajando siempre con sinceridad y honradez".

Revolucionarios están siendo estos primeros meses de Ronaldo en el palco, dirigiendo la poderosa transformación de un club que tiene un récord de abonados (hay 20.000 y una lista de espera ya de 300 que aguardan su oportunidad), con un público entusiasmado por lo que está disfrutando en el Nuevo Zorrilla. Sergio ha construido un equipo que es una roca. El Valladolid, con siete goles encajados, es la segunda mejor defensa del campeonato solo superada por el cholismo (cinco tantos en contra). Además, el Fenómeno regresa al Bernabéu con dos puntos más que el Madrid.