El City de Guardiola recibe un palo en casa (1-2)

Con Pep Guardiola sancionado en la grada, el Manchester City ha vivido esta noche una tragedia al caer contra pronóstico ante el Olympique de Lyon (0-2). El City volvía a la Champions como si hubiera olvidado el tremendo palo que se llevó la temporada pasada al caer eliminado bajo las tropas del Liverpool.

La imagen del entrenador alejado del banquillo ha emergido quizá como un estigma de aquel desastre futbolístico que le alejó del olimpo de Kiev, rematado con su expulsión a cargo del siempre polémico colegiado español Mateo Lahoz. No pudo entonces sobreponerse a la estrategia vertiginosa de Jürgen Klopp y esta noche el alemán de los 'reds' se ha reencarnado en la figura de Bruno Génésio, un francés de Lyón bien trajeado.

Bernardo Silva al rescate

Los franceses sorprendieron y dejaron medio sonado a los ingleses durante la primer parte. El City quedó perplejo ante la efectividad al contragolpe del rival.  Bien armado atrás y con velocidad en los extremos rompieron el guion de quienes daban por seguro vencedor a los 'citizen'. 

¿Podía llegar Guardiola a darle la vuelta al combate? El de Sant Pedor agotó los tres cambios y siguió encomendándose a Bernardo Silva, el portugués al que pone como ejemplo de las mejores esencias del City. La arenga sirvió para mejorar la imagen del equipo con Agüero, Sané, sobre todo Sané, y Maretz, sin prescindir del faro Bernardo Silva, que acudió al rescate con un golazo tras jugada trepidante de Sané. 

El empate hubiera sido un buen remedio en el estreno 2018-19, pero el Lyon frenó cualquier esperanza.