El Madrid se queda sin alternativas para sustituir a Zidane

El repentino adiós de Zinedine Zidane al Real Madrid ha confundido a todos en el club blanco. A la marcha del francés le ha seguido una retahíla de negativas por parte de todos los entrenadores contactados desde entonces. Los últimos nombres que se han sumado a las quinielas (Fernando Hierro y Míchel) evidencian el nerviosismo ante una búsqueda que se antoja más complicada de lo que cabría suponer.

Las razones de los diferentes noes a ocupar el banquillo blanco son variadas. Pochettino o Allegri, dos de los perfiles que mejor se amoldarían por su experiencia y prestigio en Europa, tienen contrato en vigor con Tottenham y Juventus respectivamente, equipos sin necesidad ni intención de deshacerse de sus principales activos.

El compromiso con Turín

Según 'La Gazzetta dello Sport', Allegri no querría dejar el equipo por problemas personales y por lealtad al club turinés, y en el caso de Pochettino, que sí se ha dejado querer por el Real Madrid, el principal escollo sería el propietario del Tottenham, Daniel Levy, magnate con quien los madrileños ya se las vieron en las negociaciones por Modric y Bale y que pondría las cosas muy difíciles.

Joachim Low, seleccionador alemán, se autoexcluyó la semana pasada. "Lo puedo descartar totalmente. Encontrarán un buen recambio", dijo. Otro técnico germano, Julian Nagelsmann, de 30 años y perteneciente al modesto Hoffenheim, habría sido sondeado y también habría rechazado el ofrecimiento según una información de 'Bild'. Jürgen Klopp, con contrato con el Liverpool hasta 2022 y eterno anhelo de los blancos, tiene una cláusula de salida de 32 millones, una cifra muy alta para un entrenador.

Incluso Marcelino Toral, actualmente en el Valencia, ha asegurado en una tertulia que "no me llamarán, pero no iría porque estoy muy a gusto donde estoy". El mercado externo se contrae de manera alarmante para la dirección técnica.

Los problemas de entrenar al Madrid

Ser técnico del Real Madrid supone adaptarse a una peculiar maquinaria en la que hay que lidiar con un vestuario muy complejo y con los diferentes condicionantes impuestos desde la dirección del club, algo que no todos los técnicos están dispuestos a aceptar, sobre todo teniendo en cuenta las extrañas circunstancias de la reciente despedida de Zidane.

Dada esta falta de alternativas, el Real Madrid ha tenido que rebuscar en su propia casa. Solo en este contexto se entiende que nombres como Guti, Hierro o Míchel aparezcan como candidatos. Con Guti y Hierro se buscaría repetir la fórmula que ha triunfado con Zidane: exjugadores con poca o nula experiencia al mayor nivel pero que contarían con el beneplácito de gran parte de la afición y del vestuario.

Guti ha dirigido con éxito al juvenil A de la cantera blanca las dos últimas temporadas y anunció en abril que quería buscar "nuevos retos" en un equipo de mayor nivel. Por su parte, Fernando Hierro es el actual director deportivo de la Federación Española de Fútbol, lo que podría suponer algún problema.

El caso de Míchel es diferente ya que sí cuenta con experiencia (Málaga, Marsella, Olympiacos, Sevilla, Getafe, Castilla y Rayo), aunque su último periplo al máximo nivel fue muy poco satisfactorio (fue destituido del Málaga el pasado 13 de enero). En cualquier caso, parece claro que no todo el mundo está dispuesto a entrenar al Real Madrid a cualquier precio.