EL PERFIL

Kamworor, el auténtico correcaminos

El atleta keniano es seguramente el corredor de larga distancia más versátil y completo del último lustro

El atleta keniano Kamworor gana el título mundial en la media maratón de Valencia.

El atleta keniano Kamworor gana el título mundial en la media maratón de Valencia. / periodico

Gerardo Prieto

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El medio maratón se ha consolidado como la distancia trampolín para dar el salto a los 42 kilómetros y 195 metros de los que consta el maratón completo. Consciente de su tirón popular, la Federación Internacional organizó el primer campeonato mundial de medio maratón en Newcastle en 1992. Desde entonces, Kenia ha ganado por equipos 16 de los 23 mundiales disputados. Y un keniano, Geoffrey Kipsang Kamworor, es el gran dominador de la media distancia, con tres títulos consecutivos, el último de ellos logrado en el Mundial disputado en Valencia hace una semana.

Con permiso de su compañero de fatigas Eliud Kipchoge, vigente campeón olímpico de maratón, Kamworor es seguramente el corredor de larga distancia más versátil y completo del último lustro, un todoterreno capaz de ganar en cualquier superficie, desde un título mundial de cross en 2011 para menores de 18 años en el arenal de Punta Umbría, hasta tres campeonatos consecutivos de medio maratón sobre el asfalto urbano de Copenhague, Cardiff y Valencia. Este último después de haber conseguido el campeonato de Kenia de campo a través semanas antes de triunfar en la capital levantina.

Un año después de su sorpresivo triunfo en Huelva, Kamworor protagonizaba el documental The Unknown Runner (El Corredor Desconocido), en el que se seguía los pasos del joven atleta hasta su debut en el maratón de Berlín 2012, que acabó en tercera posición con 2.06.12 horas. No había cumplido aún los 20 años y apenas acababa de integrarse en el exitoso grupo de entrenamiento de Kaptagat, en el que una frase de Paulo Coelho pegada en la pared sintetiza la filosofía de este lugar: "Si quieres tener éxito, no te mientas a ti mismo".

Dejó de ser un desconocido cuando ganó su primer Mundial de medio maratón en el 2014 con apenas 22 años

Kamworor dejó de ser un desconocido cuando ganó su primer Mundial de medio maratón en el 2014, en Copenhague, con apenas 22 años. La victoria de noviembre en el maratón más popular del mundo, Nueva York, días antes de cumplir los 26, le señala como sucesor de su mentor Eliud Kipchoge, el atleta que protagonizó en el circuito de Monza el desafío sub-2 horas en maratón y quedó a tan solo 25 segundos de cumplir su objetivo. ¿Será Kamworor el primer atleta por debajo de las 2 horas en maratón? Talento no le falta. Cubrió el parcial del kilómetro 15 al 20 en el mundial valenciano en unos impresionantes 13.01 minutos, cuando su mejor registro en pista en 5.000 metros es apenas dos segundos mejor.

Solo el británico Mo Farah, imbatible en pista, ha sido capaz de frenar la racha del keniano, y únicamente sobre superficies sintéticas. En asfalto, Kamworor es una apisonadora para sus rivales: con el título logrado en Copenhague dos años antes, el atleta de Keiyo partía como favorito en el Mundial de Cardiff 2016. Sufrió una caída en la salida y tuvo que realizar un descomunal esfuerzo para remontar y  dejar atrás al somalí de origen Mo Farah y su halo de doble campeón olímpico en Londres. Volvió a ganar pese al percance inicial y contra  una cortina de viento y lluvia, lo que no le impidió finalizar con un registro (59.10 minutos) del que aún se sigue hablando.

De vuelta a Kaptagat y a la disciplina del técnico y medallista de plata en Barcelona-92, Patrick Sang, el flamante doble campeón del mundo sufrió un aparatoso accidente de circulación, en cuya recuperación intervino decisivamente el fisioterapeuta catalán Marc Roig, establecido en Eldoret. Luego vendría su espectacular triunfo en la Gran Manzana, aguantando el acoso del explusmarquista mundial Wilson Kipsang en la llegada de Central Park. Y hace una semana, su tercer título consecutivo en medio maratón, distancia en la que solo le falta superar el récord mundial que, de momento, pertenece  al eritreo Zersenay Tadese (58.23 minutos, Lisboa 2010).