A Cristiano no lo expedientan, a Piqué, sí

El comité de competición de la Liga española ha pasado por alto el gesto que realizó Cristiano Ronaldo el pasado sábado en Ipurua ante el público local. De diferente manera actuaron en cambio cuando Gerard Piqué fue expedientado por mandar callar al aficionado perico en el RCD Espanyol Stadium.

Desde que en La Liga se pusieran serios y advirtieran que denunciarían "las celebraciones ofensivas que puedan generar crispación o que son contrarias al buen orden deportivo" el mundo del fútbol estaba en alerta; aunque en el informe publicado este miércoles por este organismo se palpa la diferencia de criterio.

La jornada pasada, en el encuentro disputado entre el Eibar y el Real Madrid, el astro portugués se dirigió al público vasco haciendo un gesto feo, recriminándoles el hecho de haber estado el partido entero nombrándole e increpándole. Tras adelantar en el marcador al conjunto blanco, Ronaldo se dirigió hacia un lateral del campo, llevando su dedo índice a la oreja derecha para posteriormente realizar su famosa celebración.

El Alavés, sancionado

En el documento publicado este miércoles por parte del comité de competición, el club vasco ha sido denunciado por los canticos que se entonaron en Mendizorroza el pasado lunes durante el encuentro que enfrentó al Alavés y al Betis. En el texto se expone que durante unos segundos "unos 600 aficionados locales entonaron de forma coral y coordinada "puta Betis, puta Betis, eh, eh".