Stuani, un lujo para Girona

En el llamativo arranque del Girona en su estreno en Primera División brilla con luz propia el nombre de Christian Stuani. El uruguayo es, tras Leo Messi (14 goles) y el delantero del Valencia Simone Zaza (10) el futbolista que más veces ha alojado el balón en las redes rivales: nueve. Los mismos que otros primeras espadas como Bakambu, Iago Aspas y Luis Suárez. Ningún equipo de la liga española, ni el Barça con el astro argentino, tiene tanta dependencia de un jugador como el Girona con Stuani, autor del 45% del total de goles de su equipo (20).

Cuando faltan todavía tres partidos para acabar la primera vuelta, Stuani está a solo tres goles de su techo realizador en la máxima categoría, que consiguió con el Espanyol la temporada 2014/15. A sus 31 años, el uruguayo vive una segunda juventud que con toda seguridad le llevará este verano al mundial de Rusia, donde su país tiene un grupo muy asequible (los anfitriones, Egipto y Arabia Saudí) para alcanzar los octavos de final.

Paso por el Middlesbrough

Sus convocatorias junto a Luis Suárez, Maxi Gómez, Edinson Cavani han sido habituales para los partidos de clasificación y en amistosos. Y el escaparate de la primera española, aunque sobretodo su estado de gracia de cara a portería, hacen impensable que el delantero nacido el 12 de octubre de 1986 en Tala no entre en la lista definitiva para disputar su segundo mundial.

Intocable para Pablo Machín, si Stuani sigue con su idilio con el gol la proyección es de 21 goles a final de curso. Todo un lujo para el Girona, un equipo experto en resucitar a delanteros. En Segunda A lo hizo con Ferran Corominas (18 goles), Ranko Despotovic (18), Javi Acuña (16), Fran Sandaza (16), entre otros.

De momento, las nueve dianas (cinco con la cabeza, el que más de toda la Primera) ya son más del doble de las que marcó la temporada pasada en la Premier con el Middlesbrough. Y lleva ritmo para acercarse a su récord absoluto, que son los 22 que marcó con el Albacete en Segunda A el curso 2009/10 y que fueron el salvoconducto hacia Primera, de donde ya no se ha movido: Levante, Racing, Espanyol y la liga inglesa.

Más de 2 millones de euros

El arquitecto de la plantilla del Girona, Quique Cárcel, intuyó que Christian Stuani encajaría como anillo al dedo en el sistema de Pablo Machín. El Girona se lanzó con decisión a por el uruguayo. Tanta, que tuvo que negociar con el Middlesbrough el fichaje del delantero. El Girona debió desembolsar una cantidad cercana a los 2,5 millones de euros. Para el club de Montilivi, poco o nada acostumbrado a pagar traspasos, una auténtica fortuna (el coste de toda una plantilla de las que tuvo algunos años en Segunda A). Pero ya se sabe que en Primera, todo se multiplica. También, por descontado, los ingresos, especialmente los televisivos (al Girona le llueven ahora más de 30 millones cuando en la división de plata ingresaba dos en las primeras temporadas y poco más de cinco en las últimas).

La buena visión del director deportivo hse ha plasmado sobre el terreno de juego. Y Machín se ha olvidado incluso de jugar con dos delanteros. Con Stuani solo arriba le basta. El uruguayo es el receptor de los centros por banda de Mojica, Aday y Maffeo. La referencia de asistentes como Borja García y Granell. El complemento perfecto para Portu. También tiene damnificados, pues acapara casi todos los minutos y de momento está dejando en un papel residual a otros delanteros como Kayode, Marlos Moreno y Olunga, conscientes que no les queda otra que esperar que llegue una oportunidad.