Cesc, el suplente más efectivo

Cesc Fàbregas empezó a jugar en el Arsenal a los 16 años. A los 20 ya se había colocado el 4 a la espalda y Arsène Wenger le había nombrado capitán del equipo. No solo alcanzó el rol de figura sino que lo representó, intentado conducir durante varias temporadas a los gunners, luchando por unos títulos que no llegaron. Quería más. Jugar y ganar. Por eso decidió volver a casa. En Barcelona encontró trofeos, seis en tres temporadas, aunque solo dos de los grandes. Jugó alrededor de 50 partidos cada año, pero por el camino se dejó su papel de protagonista, de imprescindible.

Quizás es lo que fuese a buscar de nuevo a Londres, esta vez en el Chelsea y entre los brazos de José Mourinho. El doblete de 2015, Premier League y Copa de la Liga, lo firmaron los blues con el mismo procedimiento cada fin de semana: Fàbregas dando los pases y Diego Costa metiendo los goles. Un inconformista, con la necesidad de sentirse importante para encontrarse cómodo, pero con la necesidad también de ganar.

Con estos precedentes una suplencia prolongada no entraba en el guion, pero ocurrió tras la llegada de Antonio Conte a Stamford Bridge. El Chelsea volvió a ganar, pero Fàbregas lo veía desde el banquillo. Una situación que puede haber revertido tras su último partido, contra el Swansea, donde fue titular, dio una asistencia y marcó un gol. «Al principio de mi carrera, cuando no jugaba, le decía a la gente que ni me hablara», explicó Cesc tras el encuentro. «Esto ha cambiado con el tiempo, con mi edad, con mi madurez y experiencia, que te hacen comprender que lo verdaderamente importante es el equipo».

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Cesc ha empezado seis partidos de Premier este curso, pero ha participado en 17. El Chelsea ha ganado con y sin él, habitualmente formando un doble pivote con N'Golo Kanté y Nemanja Matic. Contra el Swansea, Cesc se impuso al serbio: «Espero que haya revertido la situación y seguir jugando bien para mantener mi plaza».

Conte ha cedido a los números del hasta ahora suplente más efectivo de Inglaterra. Habiendo disputado tan solo 659 minutos ha intervenido decisivamente en 10 goles. Como insinúa el propio futbolista, quizás en otra etapa de su carrera habría forzado una salida en invierno, pero nunca lo consideró una opción. Tampoco una huída a la tentación de oriente. «¿China? Tengo 29 años».

Cesc ha superado la primera gran suplencia extensa. Tras su magnífica actuación, espera volver a ser titular el lunes frente al West Ham. Alcanzó los 300 partidos en la Premier League (46 goles y 102 asistencias). Sólo un futbolista ha dado más pases de gol en la historia de la competición: la leyenda Ryan Giggs. El galés jugó hasta los 40 en la Premier. El de Arenys de Mar tiene otros planes: «Cuando mi cerebro me diga que no puedo más, entonces me iré, probablemente fuera de Europa. He estado en el máximo nivel con el Arsenal, el Barcelona y la selección, pero cuando no esté al máximo, será el momento de irme. Pero por ahora, Chelsea, aquí y ahora».