Las cinco claves de la 18ª jornada de la Liga Santander

Sandro celebra un gol con el Málaga.

Sandro celebra un gol con el Málaga. / periodico

JULIÁN GÓMEZ / BARCELONA

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1. SANDRO ESTÁ DE PASO EN MÁLAGA

El grancanario Sandro Ramírez está dando un gran rendimiento en el Málaga, en el que recaló esta temporada tras desvincularsde del Barcelona. Con siete goles, es el máximo realizador del equipo de La Rosaleda y uno de los mejores entre los españoles. Precisamente por su buen hacer con la camiseta blanquiazul en el club costasoleño están convencidos de que el potente ariete no durará mucho en su plantilla. Argumentan que, de seguir en esta línea, a Sandro le lloverán las ofertas el próximo verano de equipos, españoles y extranjeros, dispuestos a hacerse con sus servicios aunque para ello tengan que pagar su claúsula de rescisión, pues esta es sorprendentemente baja: seis millones de euros. Fijar ese importe fue una de las pocas condiciones que puso el exazulgrana para fichar por el Málaga. Renunció incluso a exigir una prima de fichaje pese a llegar con la carta de libertad.

2. ATAR A SETIÉN, PRIORITARIO

Conseguir que el futuro de Quique Setién siga pasando por la UD Las Palmas es desde hace semanas el objetivo de los dirigentes del club insular y casi una obsesión para su director deportivo, Toni Cruz. Están todos tan satisfechos de la labor del cántabro al frente del equipo que este sábado visita el Camp Nou que alcanzar un acuerdo con él para que renueve es la prioridad de los responsables de la entidad. Tanto es así que se han parado las negociaciones con jugadores que, como Setién, acaban contrato en junio hasta saber qué pasa con el entrenador. Este ya ha dicho que su deseo es seguir. Hay, por tanto, predisposición por su parte. Sin embargo, en los primeros contactos ha quedado claro que existen diferencias entre ambas partes. En lo económico y en la duración del nuevo compromiso. Siendo importantes las primeras, más distancia hay en las segundas, pues Setién pide tres años y el club solo le ofrece uno.

3. ASPAS, CAMINO DE RÉCORD

Con su gol a Kameni en la última jornada, Iago Aspas elevó a 11 el número de tantos que lleva en la Liga 2016-17, consolidó su posición de mejor artillero español del curso y se situó a solo tres de los 14 logrados por él la pasada campaña, que son su mejor registro en Primera División. De seguir en la magnífica línea de rendimiento y acierto (también ha marcado en la Copa, en la Liga Europa y con la selección), el de Moaña (Pontevedra) no tardará en superar esa marca. También está a su alcance ser el primer jugador del Celta que anota más de 23 goles en Primera. Veintitrés son los que hizo Mauro Rodríguez en la campaña 1955-56 (uno menos que Di Stéfano, que fue Pichichi) y que desde entonces es la cota más alta alcanzada por un jugador con la camiseta del equipo vigués en la categoría. El de este domingo ante el Alavés es el primero de los 21 partidos que tiene por delante para batir el récord.

4. CEBALLOS, EN SU MEJOR VERSIÓN

Al igual que a su compañero Rubén Castro, el cambio de técnico le ha venido de perlas a Dani Ceballos. Suplente y jugador casi residual con Poyet, con Víctor Sánchez no solo ha recuperado la titularidad sino que es una de las piezas clave del Betis. Ceballos, el futbolista de mayor calidad surgido de la cantera bética en los últimos años, vuelve a ser el hombre sobre el que gira el juego verdiblanco. La confianza depositada en él por el entrenador madrileño está consiguiendo que el centrocampista (20 años) destaque tanto por su buen trato con el balón y su clarividencia en el pase como por su trabajo en labores más oscuras, a las que hasta no ha mucho parecía refractario. Este sábado, frente al Atlético, el equipo que quiso ficharle el último verano y que sigue teniéndole en su agenda, Ceballos tiene otra oportunidad para convencer a sus cada vez menos numerosos detractores.

5. MUCHO MÁS QUE TRES PUNTOS

La penúltima jornada de la primera vuelta depara un duelo en lo más bajo de la clasificación, un encuentro entre colistas. El Granada-Osasuna de este domingo tiene tintes casi dramáticos para ambos. Aunque tanto en la ciudad de la Alhambra como en Pamplona están habituados sus seguidores a vivir partidos trascendentales para el futuro de sus respectivos conjuntos, pocas veces se habrán visto en la tesitura de disputar una final a estas alturas del ejercicio. Pero esta vez es así. El choque es de suma importancia para Granada, penúltimo, y Osasuna, farolillo rojo. En juego hay algo más, mucho más que tres puntos, aunque por delante haya cinco meses de Liga. El empate no le sirve a ninguno y el que pierda quedrá muy tocado, mucho más de lo que ya está, pues tendrá la salvación aún más lejos. El ganador no saldrá de la zona de descenso, pero dará un pequeño paso en pos de la permanencia.