El comité de Tarragona ya solo trabaja para salvar los Juegos en el 2018

Tarragona pidió aplazar los Juegos Mediterráneos al Comité Internacional (CIJM) del 2017 al 2018, ha informado el presidente de este organismo olímpico, Amar Addadi. al Servicio de prensa de Argelia (SPA) desde Oran, ciudad organizadora de los Juegos en el 2021. Los Juegos se han reprogramado del 30 de junio al 9 de julio del año que viene al 22 de junio al de 1 de julio del 2018, teniendo en cuenta el denso calendario de competiciones internacionales. Las nuevas fechas encajan en el programa Olímpico Internacional y la celebración de la Copa del Mundo en Rusia en 2018.

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Para justificar la petición de prórroga, según Addadi, el comité organizador tarraconense argumentó problemas financieros por culpa de la falta de Gobierno en España durante diez meses, lo que ha tocado de lleno los preparativos. El alcalde y presidente de la Fundación Tarragona 2017, Josep Félix Ballesteros (PSC) en declaraciones a TV3 admitió que “es una cuestión de recursos, hay que evitar hacer unos juegos a medio camino, unos juegos mediocres, unos juegos deprisa y corriendo”.

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Este lunes esta prevista una conferencia de prensa para comunicarlo oficialmente porque “hay calendarios que se tienen que modificar, por eso hasta el lunes al mediodía el CIJM no lo puede hacer oficial”, aclara el alcalde tras un mutismo decretado desde el pasado jueves, cuando el presidente del Comité Olímpico Español (COE) ya avanzó la probabilidad de un aplazamiento justo antes de viajar a Orán.

AUDITORIA EN EL 2015

Ballesteros gobierna con el PP y UDC, aunque su socio de Gobierno no ha conseguido mayor implicación del Gobierno central, que, de momento, ha aportado exenciones fiscales a los patrocinadores y 3,4 millones de euros, muy lejos del resto de instituciones (Ayuntamiento, Diputación de Tarragona y Generalitat) que participan en el proyecto.

Sin embargo, una auditoría del 2015 -a la que ha tenido acceso el blog de reportajes de investigación Portaenrere-ya daba en “quiebra técnica” a la organización, que solo consiguió 9 millones de euros del sector privado en vez de los 22 previstos.

La falta de 9 millones de euros del presupuesto operativo y una organización política en vez de profesional -el responsable es el concejal socialista Javier Villamayor-han hecho la tormenta perfecta para no tener a punto, a ocho meses del primer calendario, áreas que deben ensayarse con tiempo como los sistemas electrónicos de puntuación o el transporte.