Alba Torrens anota 32 puntos de récord ante China

La alero mallorquina se supera y comanda el triunfo de las españolas ante las asiáticas

Alba Torrens entra a canasta durante el partido contra China

Alba Torrens entra a canasta durante el partido contra China / periodico

L. M. / RÍO DE JANEIRO

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

No es de las que persigue a Rafa Nadal por la Villa Olímpica en busca del preciado 'selfie' con el exnúmero uno del tenis mundial. Entre otras cosas porque Alba Torrens (Binissalem, Mallorca, 1989)  tiene una foto con él desde los Juegos de Pekín 2008. “Me hizo mucha ilusión entonces. Yo acababa de llegar a la selección española con 19 años y vivir unos Juegos con esa edad fue algo casi inexplicable. Faltan palabras. Puede que sea uno de los mejores recuerdos que tengo en mi vida deportiva”, recordaba la alero del UMMC Ekaterinburg ruso días antes de viajar a Río, donde evidentemente vive la cita olímpica con sensaciones bien distintas a las que experimentó hace ocho años. Una trayectoria plagada de éxitos individuales y colectivos hace que sea así inexorablemente.

De la ciudad brasileña puede que dentro de un tiempo acabe guardando un recuerdo distinto pero no menos placentero. De momento, en la carrera hacia las medallas del equipo español, Torrens ya ha dado muestras de su determinación y liderazgo, además de de su capacidad casi innata para entender el juego y su facilidad anotadora.

NADA IMPOSIBLE

Después de meter 20 puntos al Dream Team femenino, del que dice que que “no hay nada imposible pero quizás pelear el oro a Estados Unidos está muy cerca de serlo”, se descolgó este miércoles ante China con 32, récord anotador de una jugadora española en un partido de los Juegos Olímpicos y su mejor marca como internacional, a siete de los 39 de Amaya Valdemoro, la mejor anotación absoluta de una jugadora con la camiseta española.

{"zeta-legacy-destacado":{"strong":"Dos veces mejor jugadora de Europa,\u00a0","text":"una grave lesi\u00f3n de ligametos no cort\u00f3 su crecimiento"}}

Un muestra palpable de que Alba ha llegado a esta cita olímpica probablemente en el mejor momento de su carrera deportiva. Un recorrido que empezó en la escuela de baloncesto de Inca, la llevó a Vigo al Real Club Celta Indepo, puente hacia el Perfumerías Avenida, con el que ganó todo en el 2011 y fue nombrada por FIBA menor jugadora de Europa. Eso significó su pasaporte hacia el Galatasaray en el 2012, donde una rotura del ligamento cruzado de la rodilla derecha no cortó su progresión, pese a tenerla más de seis meses alejada de las canchas. En la temporada siguiente llegó al Mundial de Turquía 2014 para convertirse, junto a Sancho Little, en la jugadora más determinante de la selección que alcanzó el subcampeonato mundial por primera vez en su historia.

Ya estaba fichada por el UMMC Ekaterinburg ruso, en el que volvió a ser elegida mejor jugadora europea del año en enero del 2015 y con el que se proclamó campeona de la Euroliga por tercera vez en su carrera.