Carolina Marín tiene tres secretos

La mejor jugadora del mundo de bádminton recurre a su lema talismán, "calma, alegría y fuerza", en las optimistas horas previas a su estreno

Carolina Marín, en el entrenamiento de este lunes en Río.

Carolina Marín, en el entrenamiento de este lunes en Río. / periodico

JOAN CARLES ARMENGOL / RÍO DE JANEIRO (enviado especial)

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Es un vendaval. Si alguna persona en la Villa Olímpica de Río está convencida de que está predestinada a ganar la medalla de oro, esa es Carolina Marín, esa onubense de 23 años que, vía Madrid (donde lleva nueve año entrenándose como una mula), ha sido capaz de derribar la muralla china del bádminton. Un deporte dominado tradicionalmente por las jugadoras asiáticas (chinas, tailandesa, indias, taiwanesas…)  y cuyo monopolio ella sola se ha encargado de desmontar.

Doble campeona del mundo y de Europa, y número 1 del ránking mundial, Marín comenzará el jueves la participación en sus segundos Juegos con la convicción de que una medalla, y no una cualquiera ("Solo firmo el oro", dice), está a su alcance. "La rival más fuerte que tengo soy yo misma, porque más o menos las 10 mejores del mundo tenemos el mismo nivel. La esencia es el lema que tengo: calma, alegría y fuerza, que me permite sacar lo mejor de mí misma", asegura.

{"zeta-legacy-phrase":{"name":"Carolina Mar\u00edn","position":"Campeona mundial de b\u00e1dminton","text":"\"La rival m\u00e1s fuerte que tengo soy yo misma. Solo firmo el oro\""}}

Donde entrena Carolina, en el CAR de Madrid, hay un cartel en la pared con tres fotos suyas ribeteadas con las palabras mágicas: calma, alegría y fuerza. No es el único talismán que ha tenido en los dos meses largos de preparación en los que, junto a su inseparable entrenador Fernando Rivas  ("Es esencial para mí, sin él no estaría donde estoy ahora"), ha intentado emular las condiciones que se encontrará en Río, de temperatura y humedad. Su equipo ha lucido todo este tiempo unas camisetas con su imagen ganando el All England Open del 2015 (el torneo más grande) y con otro lema motivador: "Puedo porque pienso que puedo".

LA FUERZA MENTAL

No cabe duda de que la fuerza mental es, emulando a su ídolo vital en la pista, Rafael Nadal, la principal virtud de Carolina, que asegurar llegar a Río con "la mejor preparación física, mental, técnica y táctica de mi vida".  Su preparador ratifica todo lo dicho: "Hemos hecho unos entrenamientos muy demandantes a todos los niveles y, sí, llega en el mejor momento de forma de su vida, por los datos, y muchos, que tenemos. ¿Que si sentirá la presión? Este es su trabajo, y lo que hace diferentes a los campeones es que transforman la presión en motivacion".