GIMNASIA

Chusovitina se clasifica para sus séptimos Juegos

La gimnasta de 40 años participará en Río con Uzbekistán, su cuarta bandera en el historial olímpico

Oksana Chusovitina, en su participación en el Memoral Blume en el 2014.

Oksana Chusovitina, en su participación en el Memoral Blume en el 2014. / periodico

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La gimnasta uzbeka Oksana Chusovitina prolongará su legendaria carrera hasta los Juegos Olímpicos de Río, los séptimos de su carrera y una cifra "récord en la gimnasia", según la Federación Internacional.

Chusovitina, que cumplirá en junio 41 años y tiene un hijo de 16, logró su plaza en la última oportunidad posible, el preolímpico disputado este domingo en Río. Y lo hizo con un meritorio concurso completo (52,465 puntos), teniendo en cuenta que hace ya años que 'Chuso' está centrada en el salto.

La gimnasta comenzó su participación en las asimétricas (11,666), mejoró en la barra (13,200) y cumplió con creces en el suelo (12,766). Le faltaba su mejor aparato y no falló: un 14,833, la sexta mejor nota en salto de todas las participantes y suficiente para sellar su participación en los Juegos.

Oksana Chusovitina, nacida en 1975 en Bujará, ha competido durante su carrera bajo cuatro banderas. Primero para la Unión Soviética hasta su desaparición. En los Juegos de Barcelona de 1992 participó con el Equipo Unificado y ganó la medalla de oro por equipos. Como uzbeka compitió en Atlanta 1996, Sídney 2000 y Atenas 2004, como alemana en Pekín 2008 y Londres 2012 y en Río lo hará de nuevo como uzbeka.

Además de los avatares geopolíticos, hay también razones personales para tanto cambio de nacionalidad. En 1999 fue madre de un hijo, Alisher, a quien en 2002 se le diagnosticó una leucemia. La familia se trasladó a vivir a Alemania para que el niño recibiera el tratamiento adecuado. Chusovitina, que había abandonado la gimnasia tras la maternidad, se nacionalizó alemana y volvió a la competición para ganar el dinero que necesitaba.

Antes de los Juegos de Londres anunció que serían los últimos. Se hizo cargo como entrenadora de la selección uzbeka y en febrero de 2013 la FIG le autorizó un nuevo cambio de nacionalidad para que intentara volver a representar a su país en los Juegos de Río. Las posibilidades eran mínimas. Primero, Uzbekistán no se clasificó para los Mundiales de 2015, clasificatorios para Río. Chusovitina acudió a ellos individualmente en busca de una medalla en salto, otra de las vías posibles para ganar plaza en los Juegos. Lo intentó con un 'produnova', el salto más difícil que hay en el código, el único con una nota de partida de 7,0. Pero ni siquiera pasó a la final.

La última carta era el preolímpico de Río, pero eso la obligaba a prepararse a conciencia el concurso completo. A sus 40 años y con más de veinte en la élite, el reto no asustó a Chusovitina, que consiguió el objetivo en el último momento.

Las redes sociales, en las que los seguidores de la gimnasia son siempre muy activos, se han inundado en las últimas horas de mensajes de felicitación para la gimnasta, a la que se refieren con términos como "reina", "ejemplo", "leyenda" o "histórica".

Dentro de tres meses y medio, en los Juegos de Río, Chusovitina se las verá con rivales de la edad de su hijo. Y superará a muchas de ellas, que podrán presumir en el futuro de haber competido junto a una leyenda.