LA JORNADA DE BALONCESTO EN BANDEJA
Celebración coral del Barça
Navarro es el rey de la fidelidad, Tomic llega a 250 partidos y el equipo, a 133 de valoración ante Estudiantes
Joan Carles Armengol
Periodista
JOAN CARLES ARMENGOL / BARCELONA
El Barça mostró su mejor cara, la que suele enseñar cuando juega la competición doméstica. Ante un Estudiantes que hizo honor a su nombre, por su bisoñez e inexperiencia (siete de sus jugadores no pasaban de 23 años), el equipo azulgrana dejó muy lejos su imagen habitual de la Euroliga y recuperó la de la Liga Endesa, esa que le ha llevado a ganar 13 de los 14 partidos que ha disputado bajo el paraguas de la ACB.
El Palau asistió a una exhibición (89-67) y a una celebración coral de toda la plantilla, que Xavi Pascual pudo utilizar con comodidad, a excepción de Brad Oleson y Carlos Arroyo, tocados pero que el técnico tiene esperanza de recuperar para el próximo jueves ante el Khimki de Rusia, en el regreso a la Euroliga, donde el equipo azulgrana debe truncar sí o sí su racha de cuatro partidos consecutivos perdiendo.
Los 12 jugadores que Pascual puso este domingo sobre el parquet del Palau Blaugrana sumaron 133 puntos de valoración (por 46 del Estudiantes). Nada mal. «Acabar con 133 puntos significa haber jugador bien. Ha sido un partido bastante bueno en todas las facetas, en el que hemos sabido jugar con nuestras ventajas», reconoció Pascual. De esa valoración, 21 puntos correspondieron a Satoransky y Tomic, 19 a Abrines y Ribas, 15 a Doellman y solo 8 a Navarro.
DERROTA BLANCA CON RÉCORD
El veterano escolta de Sant Feliu, de 35 años, logró sin embargo igualar un importante récord de fidelidad a un club. Jugo su partido 621 con el Barça (con el que debutó en noviembre de 1997), igualando la marca que Rafa Jofresa, en dos etapas, estableció en el Joventut. Navarro solo le fue infiel al equipo azulgrana en su año en la NBA con los Grizzlies. Es el jugador con más encuentros con el Barça en la ACB, y el que suma más puntos, triples y asistencias.
El croata Ante Tomic, a sus 28 años, también cumplió un hito: 250 partidos en la Liga española. Es cierto que 106 fueron con el enemigo ancestral, el Madrid, pero ha sido en los 144 con el Barça cuando ha empezado a brillar, con promedios de 14,1 puntos, 6,8 rebotes y 20,8 de valoración. Números casi idénticos a los que hizo ante Estudiantes: 16, 6 y 21.
Y, para acabar con las celebraciones azulgranas, Justin Doellman, en su segundo año en el equipo, hizo su peor anotación (2), pero sus mejores números en cuanto a rebotes (12) y asistencias (7). Todo sumó en un partido muy desequilibrado, como lo demuestran las asistencias (24 a 11), las recuperaciones (14 a 4) y los tiros libres forzados (19 de 27, por 2 de 5).
La Penya acabó con siete partidos seguidos perdidos con una gran reacción ante el Murcia, aupado por un sensacional Brandon Paul (15 puntos y 5 rebotes), y el Manresa sucumbió en San Sebastián. En Vitoria, el Madrid cayó (86-80) ante una audiencia récord de 15.544 espectadores y ya está a dos victorias del Barça, que sigue a una del invicto líder Valencia, vencedor del Unicaja (81-70).
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